Nine

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Maratón 4/5

– Buenos dí...as – terminó la oración Brian al ver que Susan tenía el bolso en su mano. 

– Chicos... Gracias por todo, de verdad. La pasé muy bien. – habló Susan secando sus lágrimas.

– ¿A donde vas querida? – Preguntó Freddie saliendo de la cocina junto a Mary. John y Scarlett aún dormían. 

– Me voy Freddie... Gracias por estos días. – Respondió abriendo la puerta.

– Espera... ¿En qué te irás? Déjame llevarte. – salió detrás de la rubia.

Todos observaron lo que ocurría con detenimiento, al parecer Freddie había ido a llevar a la muchacha quizá a la terminal de ómnibus o
trenes puesto que no había vuelto a entrar por la puerta.

– Buenos días. – Saludó Scarlett bajando las escaleras. Pero al ver que todos estaban en silencio se extrañó. – ¿Qué ocurre?

Le explicaron lo ocurrido y comprendió todo. Pensó que sería buena idea ir a ver cómo se encontraba Roger, golpeó la puerta suavemente.

– Hoy no tengo ganas de salir Brian. – gritó desde el otro lado de la habitación.

– No soy Brian... – susurró. Y en segundos el rubio abrió la puerta, no se veía triste en lo absoluto. Se veía desinteresado y algo enojado.

– Hola. – Murmuró y volvió a entrar a la habitación, se tiró nuevamente en la cama.

– ¿Qué ocurrió? – Preguntó la castaña entrando al cuarto.

– No es de tu incumbencia. – respondió tajante.

– Bueno, sólo quería ayudar...

– Si venías a darme un sermón de moralidad, ahórratelo.

– Venía a ver cómo estabas en realidad...

– Bien. ¿Podemos olvidar lo que ocurrió con Susan? Ya se que me equivoqué en traerla...

– Roger, tranquilo. No venía a reprocharte nada. – lo interrumpió frunciendo el ceño. Vaya que tenía carácter el rubio.

– Bien. – respondió y bufó. Pasó una mano por su rostro, y después de unos segundos miró a la jóven. – ¿Quieres ir a por un café?

– Creí que te gustaba más el té. – Acotó divertida. Y éste rió con la cabeza gacha.

– De hecho si, pero sé que a ti te gusta el café así que... ¿Qué dices?

– No lo sé... No quiero dejar a John solo... ¿Podemos ir con él?

– ¿Qué hay con John? – preguntó algo irritado. Scar lo miró extrañada sin responder. – últimamente viven juntos, ¿Qué hay con eso?

– Em, ¿Somos amigos como todos los demás en el grupo? – respondió obvia.

– ¿Tu me consideras tu amigo? – preguntó ésta vez más calmo. Scarlett lo miró pensativa.

– No lo sé, ¿Tu me consideras tu amiga?

– Por algo los demás deben quererte tanto. – se encogió de hombros. Scarlett soltó una risa.

– Vaya motivo.

– Eres divertida, me haces reír mucho... Y siempre sabes que decir. – observó con una sonrisa mientras miraba sus uñas. – Además logras que la gente confíe en tí. No sé cómo lo haces.

– Ser yo misma, supongo. – se encogió de hombros.

– Bien. Puedes decirle a John que venga. – respondió parándose mientras se desperezaba.

A Kind Of Magic | Roger TaylorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora