El banquete continuó hasta la tarde, momento en que empezamos a beber; algunos lo hicieron hasta muy entrada la noche.
Decidí tomar un último baño en las aguas termales. Agus había manifestado que quería hablar con Nui antes de marcharse y Silas estaba preparando una carta para el rey. No había tenido la oportunidad de conocer el castillo o los pueblos cercanos a él, pero amaba tanto a esta tierra como si hubiese nacido en ella.
Se me hacía difícil dejar atrás mis días aquí y no quería pensar en lo que tendríamos que afrontar para sentirnos a gusto en otras tierras.
Regresé a mi tienda, y aunque quise permanecer un rato más despierto, el sueño me cobijó en sus alas y me llevó al sereno mundo de las improbabilidades. Recuerdo haber tenido un sueño en el que volaba con Kala y me sentía más feliz que nunca.
La felicidad era, por el momento, una gran improbabilidad.
—Valerian, ¿ya despertaste? Debemos ayudar a desarmar las tiendas. —La silueta de Agus era inconfundible.
—Estaré listo en un momento.
— ¿Puedo pasar? —su pregunta me tomó por sorpresa, pero no tenía motivos para negarme.
—Adelante. —Me senté para no recibirlo acostado.
—Buenos días. Por las dudas, ¿tienes algo para el dolor de cabeza?
—Abusaste del vino anoche. —Me levanté para buscar en mi bolso algo que pudiera aliviarle el dolor.
— ¡Ni me lo recuerdes! —se lamentó.
—Bibi no te dio tregua.
—Estaba emocionado porque vería a su familia —lo excusó.
—Por cierto, ¿vas a ver a Nui? —le pregunté.
En mi bolso hallé una pequeña botella de vidrio transparente que contenía un jarabe proveniente de una mezcla de hierbas.
—Es la idea, si el hada me permite hacerlo —lo escuché mientras extendíamos nuestras manos para entregar y recibir el jarabe respectivamente.
—Bebe solamente un poco —indiqué.
—¡Puaj! —Hizo una mueca de asco—. ¿Qué mierda es esto?
—Dijiste que querías algo para el dolor, no algo que fuera delicioso —repliqué.
—Como digas. Debemos estar preparados.
ESTÁS LEYENDO
Serendipia | Me encontró
Fantasy¡Hoy será un buen día!... ¿Para caer en las piernas de alguien? Val y Agus, dos caras de la misma moneda se encuentran en el bosque, pero por razones completamente distintas, uno para cumplir con su trabajo, el otro por mera curiosidad. Uno está ma...