Alejados

438 37 7
                                    

Acabé con más agua encima yo, que él.

-Bandera blanca-grité riendo, levantando los brazos mientras seguía salpicandome.

-No te oigo, ¿Que dijiste?

Traté de huir a otro sitio donde pudiera abrir los ojos pero me agarró de la cintura.

-Siempre empiezas las cosas, y pocas veces las terminas-me habló con cierta picardía, era un puto provocador.

-Puede ser que-rocé sus labios, tentada a morder su labio inferior-No valga la pena terminar nada.

Sus manos viajaron otra vez a mis muslos, apretandolos con fuerza.

-Siempre vale la pena si es nosotros-dio un suspiro-Por cosas como esas, sucede lo de ayer con la intensidad que sucedió.

Apegué el cuerpo más a él.

-Esa no era yo-susurré-No ahora mismo, así que no cuenta.

-Asi que-metió una mano por debajo de mi bikini y abrí la boca inconscientemente-Si hago esto, ¿Crees que no va a salir esa Danna dominante y que tanto placer me generó, anoche?

Negué con la cabeza pero mi prenda comenzó a descender y en medio segundo, quedé sin nada.

-Jorge estamos en un sitio...-me señaló que abriera las piernas para poder sacarlo del todo finalmente y quedó colgado de su mano.

-Aqui nadie nos puede oír-ronroneó en mi oreja-Eso significa que...

Estar así hacía que mi sexo estuviera sensible y a su entera disposición.

-¿Qué?-lo miré fijamente, viendo que sus ojos se habían tornado a un negro como todas las veces que hablaba rudo.

Estaba algo desorientada por la sensación que emanaba y el ver qué mi bikini lo tenía él, no yo.

-Que te voy a recomendar como te dije cuando salimos de los baños del aeropuerto.

Un jadeo salió de mi boca al instante, no necesitaba recompensa para ello pro estaba desenfrenado y le iba a valer lo que le dijera ahora mismo.

-Me tengo que ir acostumbrando a estos ataques tuyos en medios del aire libre?-mordí mi labio, tocando su abdomen.

-Mucho...-dijo con voz agitada-Agarrate a mí y levanta una de tus piernas ya-ordenó.

No sé si respiraba o me estaba por morir por dentro pero hice lo que me pidió, levantando la izquierda y la sujetó, al toque.

-Me encantas.

Eso salió como una bala de mí y me sujete bien cuando me miró pegando nuestras frentes.

-Mmm, ¿Y que más?-dijo incitando me a decirle

-Que no puedo estar cerca de ti sin...-sentí como su mano acariciaba mis muslos-sentir está sensación de ahora mism-o...-me tembló la voz un poco.

Eso no le gustó, le agradó y apretó ni trasero con fiereza por esa respuesta.

-Me vale por qué es lo que quería escuchar.

Pude percibir sus dedos perfectamente bien cuando me tocó por encima y abjrí más las piernas pero, las sujetó fuerte volviéndolos a dejar como antes.

Suspiré por esa acción y me relajé, no tenía nada que dominar ahora.

Otro escalofrío recorrió mi espalda y apreté los labios.

Tocó lo que quiso, todo lo que le permitía y el agua ya no estaba helada, ahora iba a quemarme viva.

Los metió lentamente pero aprovechó que estaba callada para arremeter de golpe al final.

El placer me inundaba ahí abajo mientras me sostenía para no caerme al agua a pesar de que él me tenía bien agarrada.

-¿Bien?-susurró contra mi cuello.

-Si, demasiado bie-n...-pegué mis labios a su piel.

Empezó a hacer que con cada vez que entraba en mi, soltara gemidos involuntarios y para nada silenciosos.

Le rasgaba lentamente la espalda y separé la cabeza para mirarlo.

-No digas que no quería-s...-mordí mi labio en ese momento, desviando la mirada para abajo unos segundos-Traerme aquí para est-o.

Esperaba una respuesta por su parte pero me besó de forma inmediata.

Fue un beso pasional, en el que los dos tratábamos de controlar las ganas de tener sexo ahí mismo.

Bajé la mano despacio entre los dos para ayudarle a él que de seguro estaba peor y jadeé cuando me la quitó.

-Solo yo, ¿Entendido?-dijo bruscamente.

Sus ojos tenían el típico oscuro del deseo que le inundaba y eso me ponía frágil, por no decir que mucho.

Volvimos a besarnos y lo atraje hacia a mí. Él subió la intensidad de lo que hacía y las piernas me fallaban sabiendo que me iba a venir en cualquier momento.

Metí mi lengua queriendo saborear la suya y abrí la boca en señal del espasmo final, contrayéndose un poco.

-Vamo-s, hazlo por mí...-coló su otra mano para arremeter con esta también y al poco rato,  exploté en pedazos.

Por suerte, pude alcanzar a taparme la boca como pude y solo me retorcí bastante brusco como respuesta al orgasmo que acababa de tener.

Me deje un poco caer y me abrazó fuerge, dejando varios besos sobre mi cabeza.

-Cada ve-z, es más increíble-lo notaba agitado y no es para menos.

Mi respiración iba a y venía, dependiendo de si me acordaba de lo que acababa de pasar.

Sonreí.

-Diré lo mismo-susurré.

Estuvimos un rato más así, aunque pillé mi parte de abajo de sus manos, antes de que quisiera hacerme una broma.

-Creo que es conveniente que nos quedemos algo más aquí-rió señalando hacia abajo.

Aún seguía excitado y sería mejor evitar risas por toda la playa.

-Uuh-me burlé-Haría algo pero tú mismo dijiste que no así que, puedo decir que te jodes.

Me reí en lo que él me miraba mal y tiró de mí, de un empujón, hasta apegarme a él otra vez.

-¿Lo sientes?-volvió a tensar su mandíbula.

Esto no terminaba nunca.

Asentí despacio.

-Bien-dijo-Si no te callas, me encargaré de que se baje esto más rápido de lo piensas y no será a causa de tus manos o tu boca.-bajó despacio por mi clavícula.

Me dejó helada por sus palabras pero peor por dentro.

Suspiros llenos de ti - JordannaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora