Escapada

655 60 14
                                    

Después de media hora caminando, comencé a sudar.

-Jorge, ¿que hacemos?-hice una mueca de cansancio.-Media hora y ya nos hemos alejado lo suficiente de las personas que estaban ahí.

Ni me hizo caso porque siguió caminando.

-No es mi culpa que vinieses tan arreglada-se giró a verme un segundo, haciendo una mueca divertida y puso la mano en su frente por el sol.

Decidimos esto como diez minutos antes de cortar la llamada y no me dijo donde era exactamente.

Quería tirar los zapatos, caminar por el asfalto de la carretera me estaba matando, así que me paré deshaciéndome de ellos.

-Listo, ya estoy totalmente integrada en la naturaleza-dije irónica notando el calor que abrasaba mis pies poco a poco.

-Es por aquí...-señaló unos árboles y quise mirar pero no vi ningún camino.

Había perdido el juicio.

Vi como se metió campo a través sin ningún problema, entre las hierbas altas.

-No me meteré ahí, voy a picarme con todo-hice un berrinche y caminé a paso lento, queriendo seguirlo.

-Por lo que veo nunca hiciste esto-rió tentado y quise aventarle un zapato.

-Soy completamente una mujer de ciudad-dije y seguí caminando, evitando pasar por sitios difíciles.

-Creo que te mal acostumbraré más-me miró parándose y extendió su brazo-salta aquí, ¿Quieres?...-sonrió.

Vi el tramo que era un poco estrecho y aunque no quería hacer esto, le extiendí mi brazo igual para juntar nuestras manos.

Si me caía, me molestaría todo el día.

-Jorge, lo que me mandas hacer...-lloriqueé antes de tomar impulso y dar un salto hasta donde estaba, soltando un grito pequeño al pensar que me caía pero sentí que me sujetó enseguida con su otro brazo.

-¿Te quieres tranquilizar?-susurró rozando mi piel-Te quejas más que Lucrecia-se río separándose y toda mi tranquilidad se esfumó.

-Igual de imbécil que Valerio-contraataqué.

No se libraba.

-No me hagas hablar...-me picó sabiendo lo que diría-Vamos...-me dejó espacio para seguir caminando pero no soltó mi mano, agarrándola fuerte y agradecí eso.

Quiero besarlo.

Mi mente pensó eso unos segundos pero me retracté cuando comenzó a hablar.

-Si hago esto es porque no me gusta lo normal y suelo hacerlo con mi familia en Chile-miré hacia abajo, oyendo sus pasos.

-¿Os gusta elegir el día que más calor haga para andar por el campo?-pregunté burlona y me miró de igual manera.

-No señorita-me dijo-Solemos hacerlo por tradición, solo para relajarnos y estar juntos en un día así.

Justo recordé que hacía mucho que no veía a mí familia.

Les extrañaba horrores.

Dejé mis pensamientos aparte y levanté la mirada, encontrándome con una mesa a lo lejos y vi que Jorge miraba con una sonrisa también.

Ya sabía de esto.

Quería correr hacia allá pero controlé mi impulso mientras seguía caminando.

-Esto...-susurré sin saber mucho lo que decir.

-...ya estaba preparado si...-dijo mirándome fijamente y fui divisando todo a la vez que nos acercábamos.

Suspiros llenos de ti - JordannaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora