One Shots Bughead

Embarazado

L: Papi, papi, papi, papi

Jughead volteó al ver a la pequeña pelinegra entrar corriendo a la habitación con un peluche de caballito de mar en sus brazos.

J: Hola Lena, ¿Qué pasa? -preguntó alzandola en sus brazos-.

L: Papi, ¿sabías que los caballitos de mar machos son los que se embarazan?

J: ¿Enserio mi amor?

L: Sipi.

J: Wow, no tenía idea.

Ella sonrió con suficiencia y cerró sus ojitos.

L: Eso es porque yo soy muy inteligente.

J: Tienes razón princesa, eres muy inteligente.

L: Lo sé -señaló con superioridad guiñándole un ojo-.

Jughead sonrió con ternura y besó su nariz.

L: ¿A ti no te gustaría quedar embarazado papi?

Él soltó una carcajada negando divertido.

J: No, un embarazo es algo muy complicado, sé que no soportaría llevar un feto dentro de mí, tu mamá fue muy fuerte al decidir si embarazarse.

L: ¡Oye! ¡Yo no era un feto!

J: No claro que no, desde que estabas en la barriguita de tu mami tu ya eras una hermosa princesa.

L: Bueno, a mi no me importa que no quieras quedar embarazado, vas a jugar conmigo a las mamás.

J: ¿Perdón?

L: Sí, yo voy a ser tu mejor amiga y tú serás la que está embarazada, ambas platicaremos y tomaremos el té juntas.

J: Pero ¿porque yo seré la embarazada?

L: Por que yo estoy chiquita y no quiero tener hijos, dah. Así que anda, bájame y juguemos.

Él lo dudo un poco y la bajó poniéndola en el piso.

J: ¿Segura que quieres jugar a eso? ¿No prefieres jugar a las princesas?

L: ¡Papi! Porfis -soltó haciendo un puchero-.

El pelinegro suspiró pasando su mano por su rostro.

J: Está bien, vamos.

L: ¡Yeeeiiii!

Ella lo tomó de la mano para jalarlo y correr con el hasta su cuarto de paredes rosa con azul pastel.

L: Ten papi -le extendió un casco de ciclismo- póntelo abajo de tu playera como panza.

Jughead la miró con una ceja alzada y se levantó un poco la playera para luego ponerse el casco bajo está.

L: ¡Genial! Ahora ponte este sombrerito.

Ella le pasó un sombrero color rosa con una flor morada y éste sonrió poniéndose el sombrero.

J: Y... ¿Cómo me veo? -preguntó poniendo una mano en su cintura y doblando su pierna-.

L: ¡Hermosa!

J: Hermoso -corrigió-.

L: Sí, hermoso, ven, tomemos el té.

Corrió para sentarse en la mesa y poner dos tacitas una frente a la otra.

J: ¡Hola amiga! ¿Cómo estás? -soltó fingiendo una aguda voz-.

L: ¡Amiga! Estoy muy bien ¿y tú? Veo que ya estás muy gorda.

J: ¡Oye! No estoy gorda, no digas eso porque mi pequeño frijolito puede ofenderse -llevó ambas manos a su estómago con cara de ofendido-.

L: ¡Cuánto lo siento! Puedo ofrecerte té como prueba de disculpa.

J: Mi pequeño frijolito dice que acepta tus disculpas y tu taza de té.

La pequeña río y comenzó a servir té imaginario en las tacitas sacando un poquito su lengua.

B: ¡Ya llegué! ¿¡Jughead?!

Éste se giró asustado a ver a la rubia.

B: ¿Qué te pasó?

J: Sshhh, no grites Betty, tengo un bebé en mi panza.

Ella soltó una risita y se acercó a ellos.

B: ¿Están tomando té sin mi?

L: ¡Para nada mami! Aquí está tu taza.

La mayor sonrió tomando la taza y se sentó junto a los otros dos jugando el resto de la tarde.

Algo x pero se me hizo tierno JAJJAJAJAJA