One Shots Bughead

Masaje

J: ¿Qué ocurre Betts?

B: Estoy muy estresada -bufó- El artículo debe ser publicado mañana a primera hora y aún me falta un montón.

El pelinegro acercó sus manos hasta los hombros de la ojiverde dando un ligero masaje haciéndola bajar la cabeza.

J: Estás muy tensa amor.

B: Mhhm.

J: Ven -palmeó ligeramente su espalda- vamos a la cama, te haré un masaje, luego te ayudo a terminar el artículo, ¿te parece?

Ésta asintió levantándose de la silla y dirigiéndose a la cama, se acostó boca abajo.

J: Estás tan distraída que no recuerdas como se hace un masaje.

Ella rió asintiendo para levantarse nuevamente y retirar toda su ropa. Jughead se dio la vuelta tomando una toalla y un bote de aceite olor a avellanas.

Al volver a ver a la rubia, la vio recostada boca abajo sin ropa, se acercó para poner la toalla desde su espalda baja hasta el inicio de sus piernas.

Vertió un poco de aceite en sus manos y las frotó entre sí para producir un poco de calor, las posó en los costados de su cuello comenzando un delicioso masaje que pasaba desde sus hombros hasta sus omoplatos, liberando todo rastro de estrés acumulado.

La rubia suspiró al sentir como el marcaba un patrón de ligeros pero frecuentes líneas verticales desde su espalda baja hasta su cuello.

Se dirigió a sus piernas para servir un poco de aceite en éstas y pasar sus manos a lo largo de sus piernas hasta sus pies masajeando capa parte de su cremosa y blanquecina piel.

Al escucharla suspirar, deslizó una sonrisa en su rostro, retiró la toalla de su trasero, volvió a verter aceite del frasco en sus redondas nalgas y pasó sus manos, amasándolas y dándoles forma.

B: J-Jug -jadeó-

Éste mordió su labio bajando su dedo hasta sus labios íntimos para separarlas lentamente. Un silencioso gemido salió de los labios de la ojiverde impulsándolo a colocar sus manos en sus piernas separándolas. Se agachó hasta la altura de feminidad.

Betty suspiró al sentir la respiración del pelinegro chocar con sus labios femeninos. Un gemido escapó de sus labios en el momento en que su lengua hizo contacto con la caliente y húmeda piel de su entrepierna. Jughead comenzó a pasar su lengua en rápidos movimientos haciendo que ésta gritara contra la almohada.

Cuando sintió que estaba por correrse, se separó dando un sonoro azote en su trasero. Ésta jadeó enterrando su cara en la almohada. Él la tomó de la cintura, girándola en la cama quedando boca arriba. desabrochó sus pantalones para bajarlos seguidos de sus boxers.

Se acercó para con sus manos tomar sus senos, apretándolos mientras con sus pulgares acariciaba sus pezones. Nuevamente tomó aceite para pasar delicadamente sus manos por su plano abdomen deteniéndose en su monte de venus, donde bajó hasta sus labios para penetrarla con dos de sus dedos haciendo a ésta encorvar la espalda. Entraba y salía de ella escuchando como su palma chocaba con su piel.

Ésta rápidamente llevó su mano hasta el miembro del pelinegro acariciándolo desde la cabeza hasta la base de su enorme erección. Él jadeó al sentirla masajear sus testículos. Llevó sus dedos a su clítoris moviéndolo con brusquedad observando como cada vez se ponía más húmeda. 

Llevó sus dedos hasta sus labios lamiendo todo rastro de su orgasmo.

J: Hermosa, quiero sentirte.

Ella asintió soltando la masculinidad del ojiazul. Éste caminó hasta la orilla de la cama para tomarla de los tobillos y jalarla penetrándola de una sola estocada, un fuerte grito ahogado salió de los labios de la rubia.

Comenzó a moverse en un constante frenesí, dentro fuera, dentro fuera, el sonido de sus pieles chocando resonaba en la habitación.

B: Jones -jadeó-

Jughead tomó su pierna colocándola en su hombro obteniendo un mejor ángulo y golpeando justo en su punto G.

Los ojos de la rubia se colocaron en blanco sintiendo como el eréctil miembro del ojiazul entraba y salía de sí.

Luego de poco tiempo, ambos llegaron al orgasmo. Jughead salió de ella acostándose a su costado regulando sus respiraciones.

B: Gracias, Juggie.

J: Te amo, linda, y ahora, nos vestiremos y haremos ese artículo.

Betty sonrió besando sus labios.

De antemano pido perdón por no estar muy activa, han sido días demasiado difíciles, encima mi cumpleaños acaba de pasar y digamos que me siento peor por lo que ocurrió justo ese día pero bueno, prometo actualizar pronto, lxs amo