Confía2

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Narra Sam

Han pasado algunas semanas, ellos se volvieron a su casa y sé lo que pasó con Meg... Alex hablaba por teléfono con Jack y soltó algunas cosas como que Meg es adoptada y todos lo saben, hasta Chris, y no se dio cuenta que Meg la escuchó. Meg se siente tan mal pero creo que no es solo por eso sin embargo, Meg ni quiere volver a ver ni a Alex ni a Max y mucho menos a Chris. Se la pasa encerrada todo el día. Después de unas semanas algo pasó en casa y Alex y Meg no quieren saber nada de Max, no tengo idea de porque, Alex no me habla y Meg no le habla a nadie porque se siente traicionada.

Iba a salir al super cuando alguien abrió la puerta de la casa y entró. La reconocí por su cabello pelirrojo y estaba vestida toda de negro. Era Meg.

- Me quedaré a vivir aquí -dijo- no puedo seguir viviendo allá... con ellos -yo asentí y Meg subió corriendo con su mochila, casi se choca con Jack pero paso de largo.

Jack me vio confundido y yo me encogí de hombros. Cuando estabamos en el auto le dije a Jack.

- Meg se entero que es adoptada -eso no lo sabía Jack- solo no sabe que es nuestra hija, ¿recuerdas cuando hablabas con Alex por teléfono y le dijiste que debía decirle a Meg que es nuestra hija y que te fijo que no había forma de decirle sin que sonara mal y te dio ejemplos y luego solo dijo que debía colgar? -Jack asintió- pues Meg entro a la cocina y escucho todo, Alex intento hacer algo pero Meg se fue a encerrar al cuarto, justo como hoy. Jack, me preocupa que este así, ni yo era tan así a su edad y solo tiene 14 y en unos días 15.

- ¿Qué sugieres hacer?

- Primero necesita espacio, la conozco y querrá estar sola pero no la podemos dejar sola, la haremos creer que esta sola ¿entiendes? -Jack asintió.

- ¿A que te refieres? -dijo Jack después de asentir.

- Le diré que iremos de viaje y que vendremos la otra semana, o en un mes, así ella pensará que va a estar sola, pero nos quedaremos en el sótano y sala secreta escondidos -dije.

- ¿Y que haremos con el auto y la moto?

- El auto lo dejaré en el parque o donde una amiga, la moto la dejaré aquí, seria muy sospechoso si Meg nota que no está.

- Buen punto, ¿y si pregunta adonde iremos?

- Podemos decirle que a Canadá o algo así, no mejor a New York, tenemos fotos ahí, las editamos y subo algunas a redes sociales para que no sospeche nada, le diré yo que iremos de viaje, ahorita debe tener un humor que se resuelve de mujer a mujer -dije yo.

(#)

Estaba tocando la puerta del cuarto de Meg ya que tenía llave.

- Meg, soy yo, la tía Sam -dije y me abrió- lindo suéter -su suéter era negro y andaba gorro, Meg se sentó en su cama.

- Se que sabes que soy adoptada no tienes que fingir, sé que no eres mi tía -dijo Meg- pero sé que no me ibas a decir nada porque no tenías derecho de decirme, sino Alex y Max, aun así no lo hicieron.

- Lamento la manera en la que te enteraste -dije yo sentándome a su par- Alex me llamó y me contó todo, ¿Cómo te sientes?

- Traicionada por los mas cercanos -murmuró.

- ¿Traicionada? ¿No querías pertenecer a esa familia?

- Si hubiera sido mi elección y si hubiera sabido que iba a vivir con mentirosos, no hubiera querido estar con ellos.

- ¿Ni con Chris?

- Chris también me mintió.

- El no te contó la verdad porque sabía que sus padres lo tenían que hacer, él no te mintió porque quería.

- ¿De qué lado estas Sam? -dijo Meg viéndome, tenía los ojos cristalizados y las manos hechas puño.

- Solo trato de ver ambas caras de la moneda.

- Y yo la verdad, odio las mentiras y he sido una víctima de ellas -dijo Meg y se paro y agarro su mochila- si no quieres que me quede aquí solo dilo y me iré.

- Quiero que te quedes aquí Meg -dije yo abrazándola por detrás tomándola por sorpresa- te quiero mucho Meg -dije con los ojos cerrados.

- Yo también te quiero mucho... ma -abrí mis ojos cuando susurro Meg la última palabra, ¿ma, de mamá? ¿Meg sabe... Cómo?

- ¿Ma?

- Si, ma -dijo ella- ¿eres mi mamá Sam?

- Yo... Eh... -tenía un nudo en la garganta, no sabía si decirle la verdad o si todavía no era el momento.

- Si, es tu mamá -dijo Jack por detrás y entró al cuarto- y yo soy tu papá.

- Eso lo sospechaba desde hace mucho -susurro Meg- enserio.

- ¿De qué estas hablando? -dijimos Jack y yo al mismo tiempo.

- Nunca he hablado mucho pero cuando ustedes vivían con nosotros, me la pasaba todo el día contigo Sam, siempre me gusto tu forma de vestir y actuar, de grande siempre quise ser como tu -dijo ella y yo sonreí- además que no es normal que a mi me guste la adrenalina y a mi familia adoptiva no, era un poco obvio que yo saqué un poco de todo de ti ¿no crees? -dijo eso y Jack se dio una carcajada.

- Eres tan lista y odias las mentiras como yo -dije.

- Y como yo -dijo Jack fingiendo mi voz.

Poco a poco Meg y yo íbamos tomando un poco de confianza ya que toda la vida fui su tía favorita no nos fue tan difícil, pero pocas veces me decía "ma" de mamá. Meg rara vez me dice mamá ya que yo a ella la tuve muy joven y no nos llevamos tantos años de diferencia sino poco menos de 20 años.

De por sí, Meg siempre se la pasado hablando conmigo de todo, en cambio con Jack quien habla con él en algunas ocasiones, se están poniendo al día y hablando de cosas que no habían podido haber hablado antes.

Desde mi punto de vista, Meg se esta tomando muy bien todo el tema que es adoptada, esta poniendo de su parte para conocernos mejor y claro, cualquier niña a su edad puede hacer un escándalo por eso o algo parecido, Meg ha sido y es super fuerte, no la he visto llorar ninguna vez, bueno aparte de cuando era una bebita bella y gorda.