Como estrellas

💫Capítulo 21💫

Era lunes, estábamos todos en el salón, nuestro profesor de historia estaba hablándonos sobre la segunda guerra mundial, la verdad es que él era uno de mis profesores favoritos, no era como la de matemática que entre su bipolaridad donde predominaba el mal carácter y su mirada acusadora cuando te preguntaba algo que te hacía sentir que si te equivocabas te sucedería algo muy malo, sus clases eran sumamente aburridas, sin embargo el profesor de historia le ponía corazón y tenía una chispa, ojalá hubieran más como él.

—¿Alguno sabe algo sobre el tema?—nos pregunta y Tyler y Eilean alzan la mano.

Les encantaba ese tema, el trigueño me dijo que habían aprendido mucho por los videojuegos, ni idea de que videojuegos eran esos que le enseñaban historia y pues Tyler tenía alguna rara admiración por Hitler, de echo tenía una foto de perfil de este con músculos y haciendo un gesto extraño, esos dos eran un caso perdido.

Confrontaron varias opiniones hasta que el profesor dijo un dato bastante interesante que encendió mis neuronas de concentración, aunque creo que no fui la única.

—Ahora hay algo que ustedes no saben, muchos dicen que Hitler quería dejar una raza perfecta, pero...¿quienes creen ustedes que serían esa raza perfecta?

—Los rubios de ojos azules—responde Eilean.

—¡No!—exclama el profesor con entusiasmo de que su alumno se equivocara.

Ok realmente adoro a este sujeto

—Muchos dicen eso pero en realidad están equivocados, Hitler no quería solo rubios de ojos azules porque él mismo no lo era, su concepto de raza perfecta era que midieran lo mismo.

Debió ver las caras de confunsión de todos, porque continuó con su explicación.

—O sea que tuvieran la misma medida de un brazo que otro, al igual que los pies y así sucesivamente—todos nos quedamos extrañados.

—¿Medían a la gente para ver si tenían sus extremidades parejas?—pregunta Sofía y el profesor asiente.

—¿Y había alguna otra característica para seres perfectos?—pregunta otra chica.

—Pues entre los seres más perfectos se ubicaban los que tenían otra clase de extremidades muy...—acercó el dedo índice y el pulgar haciendo señal de que debían tener un pene muy pequeño—esos eran los seres puros.

—¡Entonces David es un ser puro!—gritaron Tyler y Eilean al mismo tiempo.

De más está decir que todos en el salón explotaron a carcajadas, incluida yo, incluso el profesor.

—¡Yo no soy puro!—se defiende el rellenito pero con esto solo logra que todos se reían aún más.

Definitivamente las clases de historia se acaban de convertir en mis favoritas.

✨✨✨

Todos los del salón estaban saliendo para ir a sus casas, excepto yo que tenía que barrer un poco el suelo, me tocaba ese día la limpieza.

—¡¿Dónde está mi esposaaaa?!—oía gritar a Am en la puerta del salón con su energía y vitalidad de siempre

Probablemente no me veía por el ángulo en el que se encontraba.

Levanté la mirada y vi que Elena estaba frente a ella, probablemente fue a ella quien le preguntó sobre mi ubicación, sin embargo la cara de esta era un espectáculo, tenía los ojos tan abiertos que parecía que se le iban a salir de las cuencas, su boca parecía una rayita y no se movía, ni siquiera la veía respirando.

—Hablaba de Rach de Rach—aclara Am al ver que Elena comenzaba a considerarla una lesbiana.

Al parecer sentía que ella también podía estar en peligro de su gran seducción, me río mientras veo el malentendido acontecer a unos metros de mí y finalmente guardo la escoba dando por terminado mi trabajo.