Hoy era un día especial. No para mi madre, tampoco para Demetria ni para alguien más. Era un día común para muchos, menos para dos personas. Hoy era una fecha muy especial para mi.
Había despertado en un primero de julio del año 2014. Al abrir los ojos pude percibir el olor a tierra mojada, yo amaba eso. Había llovido, los días lluviosos eran de mis favoritos. Con pereza me levanté de mi cama incorporandome para tratar de ponerme de pie.
Cogí unas pantuflas de conejo y me dirigí al sanitario.Dentro de este, decidí hacer mis necesidades y tomar una ducha. Después de todo, hoy era algo así como, el día más bipolar de toda mi vida. O por lo menos ese augurio tenía.
Me vestí con unos vaqueros ajustados en tono azul cielo y una pólera roja. Me veía bien, así que proseguí por abrochar las agujetas de mis converse blancas y peinar mi cabello en una cola alta de caballo.
Trotando y dando pequeños saltitos bajé las escaleras. Me gustaba mucho el olor que provenía de la cocina.
Así que, cuando entre en el comedor, pude observar el buffet que mi madre había preparado para mi. Frente a mi, estaban una torre de tortitas, waffles, un omelette y jugo de naranja.Luego de haberme devorado todo, agradecí a mi madre por sus atenciones y tras tomar las llaves del coche, salí de casa.
El coche era de mi madre, pero nunca tenia problema con que yo lo condujera.
Me dirigía a un lugar muy especial, después de todo tendría muchas cosas que hacer y ver.
Iba directamente y con destino a Forest Rose.
Adoraba ese pueblo, bueno, más que un pueblo común era un bosque con casas y tiendas pequeñas a su alrededor.Luego de 40 minutos de camino, llegué a Forest Rose.
Mi boca se estiró hasta ambos lados formando una sonrisa. Ahí estaba, Joe me miraba contento. Hoy, cumplíamos un año de ser una pareja formal.
Estaba realmente feliz estando con él; y es que todo sucedió tan rápido que no pude ni siquiera pensar antes de aceptarlo. La última noche que vi a Gale, me había quedado dormida viendo su fotografía, a la mañana siguiente había recibido un mensaje de Joe diciéndome que quedaramos. Yo acepté salir con el,y, de esta manera comenzamos a conocernos más, a salir mas, y entonces pasó.. Nos dijimos que nos queríamos y ya. Pronto todo fueron colores para mi, el me había rescatado de la maldicion Ross.A Gale y a Robert no los había vuelto a ver. A Gale, desde el día en que se fue y a Robert desde que habíamos terminado en la cafetería. Recordar mientras corría no era una buena combinación. Sentí el suelo moverse y, sin poder evitarlo, caí al pasto mojado.
Que pena. Con cuidado me levanté del suelo, claro que Joe me había ayudado.
—¡Vaya, pequeña! Haz quedado un poco sucia —Joe miró mi camisa y yo también— hasta con lodo en la cara, eres hermosa.
Joe me sonrió y mis mejillas se tiñeron de rojo, yo le devolví la sonrisa.
—¡Feliz aniversario!—dije levantando los brazos.
—Feliz aniversario, cariño.
Joe se inclinó y me besó tiernamente en los labios. Ambos nos tomamos de las manos y caminamos por todo el lugar. Reíamos, disfrutábamos y sobre todo, nos queríamos. Muchas personas me miraban, tenía un mancha en la parte inferior de mi camisa roja, pero a mi no me importaba nada que no fuese Joe. Tal vez este sentimiento había surgido como algo apresurado, pero era suficiente con que ambos lo sintieramos para saber que juntos, estábamos a salvo.
Joe me llevó hasta un lugar en el que había un campo lleno de flores blancas. Era una vista increíble.
El se giró hasta mi y tras besarme, observé como se inclinaba y se sentaba en una pierna teniendo la otra flexionada.
ESTÁS LEYENDO
Recuerdos©
De Todo"Igual que las demas" Ese, era mi lema. Lo diferente es malo. La sociedad apesta y el amor.. No es un mito.