¿Alguna vez has deseado retroceder el tiempo? ¿Has siquiera pensado en que hubiese pasado si tus malas acciones se borraran? O tan siquiera, te has preguntado.. ¿Porque lo hice?. Pues yo si, tal vez no lo premedite, solo reaccioné. La vida no me ha sido fácil, no soy un verdadero "Buen" chico, he cometido muchas estupideces considerando que solo tengo 19 años.
Siempre he sufrido por conseguir lo que quiero, en este caso, a Keyla. Si, debo admitir que sus encantos me han pegado y fuerte. Nunca fui de la clase de persona cursi, claro que tuve chicas, pero jamás fue algo serio, ya saben.. De una noche y ya. Keyla, ella es mi motivación en la vida, aunque mi intento de vida sea una mierda. Cabe admitir que Key, es una chica hermosa, inteligente y sobretodo.. Especial. Tenerla es todo lo que quiero, en el aspecto de tener, me refiero a que ella se fije en mi, que no haga caso de los demás. Se que ella también ha sufrido mucho y todo por el idiota de Gale, aun no entiendo a mi primo. Tengo una noticia que darle a Keyla pero sinceramente no se como lo pueda tomar, me asusta lastimarla con mis palabras, aunque se que la lastimaria más verlo por sus propios ojos.
Hemos estado apenas dos días, unos dos días maravillosos. ¿Ya mencioné que me besó? Lose, parezco un niño pequeño emocionandome pero, todo me ha tomado de sorpresa. La quiero.
Hablando de ella, acaba de salir de la piscina, aun mojada luce espectacular. Se está acercando a mi con una sonrisa enorme, espero que así siga después de lo que le diré. Keyla al ver mi cambio de gesto al pensar en lo que le diría, levantó una ceja ante mi repentina seriedad y se sentó justo frente a mi.
Este era el momento, tenía que decirle antes de que pasara más tiempo, pero, ¿Cómo lo tomaría?
-Key.. -empecé nervioso - es necesario que sepas que...
Nada. No pude decirle nada. Temía a que comenzará a llorar o aun peor, que tratara de no darle importancia aunque estuviese podrida en su interior por la noticia. Suspire. Estaba actuando como un cobarde. Keyla todavía tenia su vista fija en mi, con la diferencia de que ahora se pasaba un aire de angustia en su cara y, antes de que se asustara pensando lo peor, continue:
-Key, debes saber que ayer por la noche.. Wendy y Gale, se comprometieron.
Luego de terminar de mencionar cada palabra, el ceño de la chica más hermosa que estaba frente a mi, se frunció. Su labio inferior comenzó a temblar y su mirada se volvió débil y triste. Keyla bajo la mirada a lo que supongo fueron sus manos entrelazadas, estaba hecha polvo. Algunas lágrimas escaparon de su rostro, no soportaba verla llorar, así que me acerque a ella y me senté en cuclillas para mirarle y limpiar con mi pulgar cada una de sus lágrimas. Cuando traté de acunar su mejilla izquierda, Keyla me miró y empujó mi mano con fuerza. Me quedé mirándola, estaba corriendo hacia la entrada trasera del hotel. Odiaba verla sufrir.
Tratando de darle un poco de espacio me quede en la misma mesa sentado con la mirada perdida. No podía imaginar como estaría Keyla en la habitación, su gesto.. Su gesto sería algo imposible de olvidar. Mis palabras le habían ocasionado mucho daño, cosa que no merecía. Obviamente no pude evitar sentirme mal cuando me rechazó y salió corriendo pero, ¿Qué era lo que esperaba? ¿Que Keyla se mostrara cariñosa o amable conmigo después de causarle dolor con la noticia? Yo si que era un estúpido.
El sol comenzó a meterse y pensé en que ya era hora de volver a la habitación, francamente sentía un nudo en el estomago por la incomodidad e impotencia que me causaba ver llorar a Keyla, no quería siquiera imaginarme en el estado que estaría, después de todo, ella todavía amaba a Gale.
Entre al ascensor, estaba hundido en mis problemas, sentía nervios horribles recorriendo mi cuerpo cada segundo. Inconscientemente comence a juguetear con mis dedos, eso siempre lo hacía cuando tenía nervios. Aunque nada de esto fuera mi responsabilidad, me sentía culpable por el hecho de haberle contado del compromiso de Gale. Se que la tomó de sorpresa porque aunque Wendy tendría un bebé, todavía quedaba la esperanza de que no contrajeran matrimonio, después de todo, nadie sabía de quien era el futuro bebé de Wen. El tema me ponía a dudar de que ese bebé fuese de Gale, después de todo, yo también podría ser el padre. La rabia me traspasó recordando el tiempo que fui su amante. De nuevo la culpa llegó a mi, no podía creer que yo hubiese sido el chico con el que Wendy engañaba a Gale.
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Recuerdos©
Losowe"Igual que las demas" Ese, era mi lema. Lo diferente es malo. La sociedad apesta y el amor.. No es un mito.