Recuerdos©

Capítulo 4

Luego de la comida, la madre de Gale anunció su compromiso con Patrick Lawrence. Todos se veían realmente felices. Gale fue el primero en felicitar a Zara, no pude evitar esbozar una sonrisa ante el acto de amor entre madre e hijo. Una hora mas tarde, los invitados habían pasado a un salón cálido en donde había cientos de regalos. Mi cara debió de haber sido un poema cuando Gale mencionó que eran para mi. Entre aquellos obsequios habían bolsos, ropa, maquillaje y lo que más me llamo la atención fue un espejo. Si, un espejo. Cogí la nota que tenía pero no había letras, ni una sola. Raro. Después del tan incómodo rato que pase al recibir regalos de la familia de Gale, invite a Robert a caminar por el enorme jardín de la mansión.

Era increíble la inmensidad de los campos verdes, pero era aun más increíble estar con Robert, el era simplemente un chico con el que cualquiera querría salir. Al llegar la noche era el brillo de la luna quien alumbraba la mirada de mi tan fiel compañero. Robert se gira hacia mi y me mira con un dejo de tristeza.

-Eres la chica que Gale más quiere.

Sorprendida por su tono y por lo que acababa de decir respondo.

-Seguro lo dices en broma-miro mis dedos entrelazados, siempre lo hago cuando me entra el nervio- el no puede quererme, si no, no hubiese besado a la.. Zo.. Nadie.

Toma mi barbilla para hacer que lo mire a los ojos.

-Tu también le quieres y me besaste; comprendo tu cabreo por la pequeña mentira pero..-le interrumpo.

-¿El te ha contado eso?

Asiente. No puedo creerme esto, Gale le contó a su primo que yo me he cabreado, lo mato ahora si. Joder. Seguro se lo dijo a más personas, pero prometo que esto no se va a quedar así.

Me levanto del tan cuidado césped y sin dejar a que Robert termine de contarme lo que Gale le dijo, me voy aun más cabreada. Aisss.

Corro hacia la puerta de servicio consciente de que Robert me sigue, gritando: ¿A donde vas?¿Hize algo mal? ¡Detente! ¡Key!

Abro de un empujón la puerta que usa el servicio y corro como una loca hacia el salón donde acaba de empezar un baile. Me detengo en la entrada mirando entre la gente. Veo a Gale, esta bailando con la misma chica que besó. Se ve muy contento y a mi me quema, estoy que me muero de celos. Idiotas. Gilipollas.

Con decision camino hacia ellos, Gale al verme sonríe pero esa sonrisa se esfuma al notar mi cabreo y como miro a la chica.

Robert me detiene del brazo mientras niega con la cabeza. ¡No! ¡Suéltame! Gilipollas doble. Me giro hacia el chico que tiene mi brazo y en un arrebato me suelto de el y prosigo hasta la pareja de tortolos que me miran sorprendidos. Miro a Gale, luego a la chica.

Gale da un paso hacia adelante y la toma del brazo, la zorra parece encantada de la vida mientras sonríe como la vil perra que es. Yo le quitaré esa sonrisa de mosca muerta.

Tensión. El aire podría cortarse con un cuchillo. Miro a Gale y el a mi. Nos retamos por segunda vez en el día con nuestras miradas. La chica tratando de ser el centro de atención se planta delante de Gale y mientras me escanea con la mirada y hace un gesto de disgusto, musita :-Gigi, querido, se ha metido una rata a la fiesta.

Gale me mira y defendiéndome dice:

-No la llames así Wen, ella no es ninguna rata, al contrario, es mejor persona que todos juntos en esta habitación.

¿¡Wen!? ¿Ella es Wendy Llaillay?

Ella me mira de nuevo y me da la espalda.

-Gigi pequeño, debes de entender que defender a esta..