Bajo el mismo cielo

Capítulo 10

Estaba encerrada en mi habitación y para mi sorpresa nadie se atrevió a buscarme depués de la escenita que monté en la cena.

Mientras el tiempo pasaba yo más me arrepentía de haber explotado como lo hice.

¡Fui estúpida!

Me dejé llevar por todo el dolor y confusión que sentía y solo había empeorado las cosas para mí en esta casa.

Ya eran pasadas las 12 de la madrugada y yo seguía sin poder pegar un ojos así que con mucho cuidado para no hacer ruido me salí de mi cuarto con la intención de caminar un poco por los largos pasillos de la casa.

Y así hice,estuve caminando sin rumbo por el frío piso de mármol que se cenrnía bajo mis desnudos pies hasta que me encontré en el área prohibida.

Las palabras de advertencia de Trevor vagaban por mi mente pero aún así me importaba una mierda lo que me haya dicho,estaba cansada de seguir órdenes y recatar mis emociones.

Por una vez haría lo que se me diera la real gana,así que con una exceso peligroso de confianza y rebeldía caminé con total seguridad por el pasillo prohibido.

Estaba totalmente desolado,no había adornos ni obras de arte como en el resto de la casa,en ese momento pasó por mi cabeza.

¿Por qué Trevor había escogido su habitación tan apartada de todo y de todos en esta casa?

Absolutamente no había nada mas aquí arriba que su cuarto.Podía sentir el aire frío y el aura de soledad,de abandono colarse por mis huesos.

Haciéndome sentir escalofríos por todo mi cuerpo,mi valentía empezaba a decaer con cada paso que daba.

Me encontraba en medio de la madrugada y de la oscuridad de la noche caminando por el pasillo de Trevor a pesar de que este me había advertido que no debía estar cerca.

De pronto sentí una puerta abrirse y la madera de esta rechinar al moverse,llevé mis manos hacia mi boca en un grito ahogado.

Miedo...eso era exactamente lo que sentía.

Miraba hacia todos lados en busca de poder ver algo pero me era imposible,estaba tan oscuro como la boca de un lobo.

Lo que pasó después hizo que todo el pánico que sentía se esparciera por mis músculos haciendo que no pudiera moverme y las palabras no salieran de mi boca debido al gran nudo que se había instalado en mi garganta.

Las grandes y frías manos de alguien se habían posado en mi boca con fuerza atrayéndome hacia un ancho pecho,presionándome con fuerza.

Podía sentir la respiración agitada de la persona atrás de mí en mi oído junto con los latidos acelerados de mi corazón en pánico que se hacían presentes en el silencio de la madrugada.

Sentí como el desconocido me obligaba a moverme junto con él hacia una ubicación no conocida para mí.

Hasta que escuché el ruido de una puerta cerrarse y seguido de esto una luz cegadora que hizo que debido al escosor de mis ojos los cerrara y los rascara un poco.

Para después ir abriéndolos poco a poco e ir acostumbrándome a la luz hasta que lo ví...

Frente a mí yacía la gran figura de Trevor con unos shorts de pijama y sin camisa.

Sin embargo el echo de que estuviera sin camisa no fue lo que más me impresionó,sino fue lo que ví debido a eso.

Tenía una gran cicatriz que recorría desde su definido abdomen hasta el inicio de sus hombros,era inmensa.