[XIX]

851 83 6
                                    

El pecho ardía demasiado, se sentía hirviendo, magullado y muy tirante, como si algo extraño estuviera en medio de todo su torso, trataba de abrir los ojos, pero aún se sentía muy mareado, además, el lugar estaba bastante oscuro, era imposible saber con certeza donde estaba. Sintio ruidos a su alrededor, pequeños pasos que se acercaban y cuando comenzó a abrir más los ojos, la calma volvió a él, Steve estaba ahí, a su lado, quizás ya lo había salvado del tormento de hace algunos momentos, pero la suspicacia volvió. Su corazón le gritaba que reaccionara, ese no era su Steve.

— Al fin despiertas, beloved... —comento el hombre— admito que me partió el alma verte sufrir tanto, pero valió la pena, cada cosa que pasaremos ahora... valdrá la pena —tomando su mano

— ¿Dónde... estoy? —tratando de moverse— ¿Qué es... esto? —dándose cuenta de que está amarrado a la cama

— Si, disculpa por eso —agrego— tuvimos que sujetarte bien, es más que nada para que no te dañes a ti mismo o quieras escapar —su voz se tensa—, que te fueras lejos, eso jamás lo soportaría... me moriría de la pena, pero muy pronto te soltaremos, en cuanto el proceso se termine

— ¿Proceso? —repitió algo aturdido, sintiendo un dolor agudo en el pecho la tratar de subir la cabeza— ¿Qué me hicieron?

— Solo fue el primer paso, para cuando terminemos... todo el dolor que alguna vez sentiste, lo olvidaras por completo —sonriendo— y al fin podremos vivir esta vida que tanto hemos soñado

Completamente confundido— ¿Qué mierda estas diciendo? —tratando de mover los brazos

— Lenguaje —respondió. Tony palideció, sonaba igual a Steve, se veía igual a Steve, pero no era él ¿Qué es lo que estaba sucediendo?

— ¿Quién eres? —consultó la duda que lo carcomía

— Soy Steve —respondió seguro— ¿No me digas que olvidaste eso? —riendo con gracia

— ¿Quién eres... en realidad? —insistió con rabia contenida

— Soy Steven Grant Rogers, nací el 4 de julio de 1918, mi padre es Joseph Rogers, mi madre es Sarah Rogers, nacido y criado en el hermoso Brooklyn... —vuelve a sonreír— ¿Quieres que siga?

— No lo entiendo... —dijo confundido el joven

— Déjame explicártelo mejor —acerca una silla y se sienta a su lado— yo soy el verdadero Steve Rogers, al menos el de esta línea temporal —Tony permaneció en silencio tratando de mantener la concentración, aún estaba algo adormilado por el dolor y de seguro todas las drogas que le suministraron— yo fui el que salvo a esas miles de almas, quien se sacrificó por la libertad, por América... y termino congelado en el hielo —exhala por la nariz con cierta pena— perdiendo todo lo que más amaba, todo lo que defendía, todo lo que alguna vez creí justo —mira hacia otro lado— hasta que HYDRA me encontró, o mejor dicho... me salvo

¿Él Steve de esta línea temporal? ¿Eso era posible? Su mente buscaba ordenar ideas y momentos, conectar todo lo que Steve le había dicho, pero los tiempos y circunstancias no calzaban.

El hombre prosiguió— se habían dado cuenta que alguien quería arruinar sus planes, que alguien sabía mucho de ellos, todo lo que hacían, sus métodos, sus ataques, hasta el funcionamiento más interno, ahí fue cuando rastrearon a el falso Steve y se dieron cuenta que estaba vivo, que no había muerto en el hielo y cuando perdieron al soldado del invierno, confirmaron sus sospechas de que este hombre que venía arruinando sus planes desde hace años... no era el Capitán América que habían enfrentado años atrás, así que, empezaron a buscar una respuesta a la incógnita, y dentro del hielo que se suponía no debía haber nada... me hallaron...

A través del tiempo [STONY - ENDGAME]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora