Christopher, Joel y Erick son mejores amigos, unos muy peculiares. Unos que no pueden estar separados nunca. A los que las palabras lindas y de amor nunca les faltan. El apoyo que se brindan entre ellos es inmenso. Tienen una conexión tan electrizan...
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Una semana después
Después de esa charla que tuvieron los mejores amigos las cosas han estado un poco más electrizantes. Si antes ellos vivían en una burbuja llena de complicidad, ahora se ha multiplicado con más intensidad, llena de emociones, siendo una de las dominantes la tensión, claro que sin llegar a la incomodidad.
Ahora los cincos chicos se encontraron en el salón de eventos del hotel donde se hospedan, preparados para comenzar con el live que tenían planeado desde hace unos días.
Estaban Christopher, Joel y Richard sentados en un sillón, y a sus pies se hallaban Erick y Zabdiel con sus guitarras en sus regazos.
—Bien, chicos, saben que soy fan de ustedes y los apoyo totalmente, pero traten de disimular su coqueteo descarado, ¿Si? —recomienda lleno de diversion el pelirrojo.
—¿Qué? Estas loco, ¿Cuál coqueteo? —réplica el de ojos verdes.
—No se hagan, tu estabas ignorando a los chicos y de repente ya estaban bien. Y para el colmo llegaron más potente.
—¿Más potente? —interroga Joel.
—Si. Saben, sus ojos siempre cuando se miran transmiten algo lindo, hace notar cuanto se aman. Aunque les guste negarlo.
—Claro que nos amamos loco, no lo niego. —dice Christopher interrumpiendolo, sonríe y continúa.— Así como los amamos a ustedes. Todos somos hermanos.
—Ay por dios. Así no va. Que les cuesta aceptar la realidad. —habla ahora el boricua.— Saben que Richard no se refiere a eso.
— Exacto. Y ahí iba a llegar y me interrumpieron. —se queja el dominicano.— Desde hace dos días sus miradas cambiaron. La de Erick esta como omega en celo, les dice "vengan y devorenme completo, se que quieren". La de Chris es tipo "grrr, te voy a comer, pero quiero que Shoel me devoré a mi". Y Joel "no antojen, o sea, quiero bros, pero contenganse que ya lo haré, nomas aguanten un poco". —"interpreta" el chico. Y para su sorpresa y la de Zabdiel los tres chicos sueltan unas grandes carcajadas, siendo la menos esperada la de Joel.
—En serio men, estas desquiciado. —dice aún con residuos de risa el de ojos miel.
—Se los he dicho y no me creen, si Richard sigue así, no sé, con el dolor de mi dulce alma habrá que internarlo. —habla Joel con mucha "aflicción".
—Está aquí abajo sentí tu veneno, Joey. —se burla Erick.— Pero si que te pasas, Rich. Cuando vas a entender que no lograrás nada shipeandonos.
—Pues según yo, gano mucho. Pero ahora una ultima pregunta. —les dice y ellos asienten.— Ya veo que están de muy buen humor, sus miradas y su cercanía. Díganme, ¿estuvo buena la reconciliación? Porque a mi parecer si. ¿Estuvo intensa? ¿Mucho se-
