Capítulo Dieciséis: Gimnasio, fotos y provocaciones

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Cuatro días después

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Cuatro días después


―Erickin. ―llamó el castaño al chico que lo acompañaba, estaban en la sala de juegos del hotel, esperando que pasen las horas hasta poder encontrarse con su amigo en su habitación, el cual se encontraba en el gimnasio, ellos no tuvieron de otra más que irse a entretener, ya que el mexicano no le gustaban las distracciones mientras se ejercitaba.

Cuando el menor dirigió su mirada hasta Christopher lo notó mirando impactado su celular, de inmediato se acercó a él ―¿Qué pasa, Chris? ―angustiado le preguntó. El ecuatoriano al notar la reacción que provocó relajo su rostro y le explicó con una sonrisa apenada.

―Tranquilo, no paso nada, al menos no nada malo. ―calmó al más joven― Pero, Dios, tenemos que conversar seriamente con nuestro querido Joe. No sabes lo que acaba de hacer. ―la indignación fue notoria en su habla.

―¿Qué hizo Joel? ―preguntó con una sonrisa divertida el pelinegro, esperando algo sin sentido de parte del mayor.

―Acaba de publicar una foto. Pero, entiendes, es la foto, o sea, cómo se atreve a publicar algo así. ¡No debe publicar algo así! ―habló desesperadamente sacudiendo al cubano por sus hombros. Este se zafó de sus manos burlándose.

―¿Qué? No te entiendo, ni que hubiese publicado una foto desnudo.

―¡Es que si lo hizo! ―gritó.

―¿QUÉ? ―otro grito aún más alto.

―Sí. Bueno, no del todo, pero si con una toalla que prácticamente se le está cayendo. ―lloriqueo.

―Bueno, bien, no es nada. Somos amigos. No tenemos que opinar sobre eso. ―trató de convencer al chico y muy en el fondo a sí mismo. Con una sonrisa tensa lo miró― Recuerdas, eso hablamos cuando tú lo hiciste, y, en verdad no tienes el derecho porque tú lo haces con frecuencia. De los tres el único que tiene cara para hablar de eso soy yo.

―Tienes razón, pero sabes, el que no debamos no evita que lo hagamos. Lo comprobamos la última vez que publique la foto. ―dijo mencionando esa vez que Erick se descontroló― Pero, bien, no me hace feliz que la haya subido, casi me da igual, el problema es lo que causa en mi la foto, no en otros que la vean. ―reconoció con honestidad.

―¿Qué te causo? ―cuestionó con curiosidad.

―Ardor. Ardor por todo mi cuerpo y en toda mi mente. ―exhalando soltó. Dejando aun más sin palabras al menor, por igual intrigándolo,

―Déjame ver la foto. Estás exagerando. ―pidió.

―No lo hago. ―contestó mientras buscaba la foto― Toma. ―le pasó el celular al encontrarla.

―A ver... Te aseguro que exa-. ―se calló y solo pudo soltar un jadeo al ver la foto, Joel en el baño de su habitación con una toalla amarrada en su cintura, frente al espejo, dejando todo este musculoso y marcado torso a la vista― Okay, no exageraste, es una linda foto, muy interesante. Interesantemente caliente.

Pretend //CNCO\\ JopherickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora