Otro día más.
Vuelvo a levantarme con un mensaje de él.
“¿Cómo va tu día?” me pregunta.
Sonrío.
“Bien, ¿qué tal el tuyo?”
“Quiero que bajes Skype”
Y ya lo tengo.
“Está bien”
“Hemos estado hablando seguido” me dice de repente.
Es cierto.
“Lo sé, nunca me había pasado” le respondo.
Él comienza a escribir.
Mis nervios aparecen.
“Escucha esta canción”https://www.youtube.com/watch?v=dCP2q2JVkk4