Te he podido superar. Al fin puedo decirlo con tanta seguridad, Diego.
Estaba leyendo la última carta que te escribí, y muchas cosas han cambiado.
Ya no pasas por mi mente, y ni siquiera creo que todo lo que escribí en ese momento, siga en pie el día de hoy.
Yo no voy a esperarte por veinte años, y no voy a estar dispuesta a esperarte por más tiempo tampoco. No voy a pasar toda mi vida esperando por alguien que tiene posados los ojos en alguien que no soy yo. No pienso perder más mí tiempo... y a decir verdad, antes me dolía saber que estabas con alguien más.
Ahora, ya no es así. De hecho, no siento nada en este momento, porque me di cuenta de algo: a mí ya no me importa lo que hagas, y lo que pase en tu vida.
Ya no me interesa verte, y ya no pienso perder más mí tiempo escribiéndote cosas, escuchando canciones que me recuerden a ti. Ya no voy a contarle a nadie más sobre ti. Ya no te tengo en ningún lugar de mis redes sociales que me hagan querer saber de ti.
Espero que seas muy feliz. En este momento de mi vida lo estoy, porque al fin pude sacarte completamente de mi vida. Me siento tranquila, me siento libre... me siento tan limpia.
Y, no me arrepiento de nada. Solo me arrepiento de haber perdido tanto mí tiempo.
Y, me di cuenta de algo más: fuiste la razón, fuiste ese alguien que me hizo reaccionar.
Quizá por eso me aferré a ti, pero ya es suficiente. Es momento de que siga mi camino, tal como tú lo hiciste.
La próxima vez que vuelva a escribir algo tan profundo, va a ser dedicado a alguien que no me haga hacerme dudar si hay algo malo en mí. Va a ser dedicado a ese alguien el cual se tomará el tiempo de responder un mensaje, de hablar claro, de poner todos sus sentimientos claros. Aquel que no me dé un amor a medias.
Me despido de ti para siempre con esta carta que nunca verás, escuchando Clean – Taylor Swift a todo volumen con mis auriculares.
Estoy lista para comenzar de nuevo. Tu nombre ya no va a volver a atormentarme nunca más. No volverás a mi vida de alguna u otra manera. Se acabó.
Sé feliz, sé que lo eres. Te deseo lo mejor en tu nueva vida. Y sé que de algo estoy segura, cuando escuches a Taylor Swift, te acordarás de mí. Espero que esa canción sea Clean.
Bere.
