Tomhasei
(Horas antes)Debía correr el riesgo. Tenía que hacerlo porque su paciencia se había colmado del juego de la bastarda y de esa maldita Impura. Ya no le importaba la doncella tanto como su hermana.
Kelleia era una completa idiota por volver por su madre… pero el rey sabía que ese era el punto débil de la chica. Y por eso estaba seguro que la bastarda ya se estaba poniendo en camino hacia Eldreck.
Aeneas Kalos llegó al palacio Omnia Nox demasiado temprano.
—Tienes a tu disposición algunos guardias para traerla de regreso —dijo antes de tomar asiento detrás del escritorio.
—¿Qué sucederá con la reina? Tenía entendido que no lo dejaba entrar a la Capital.
—No entrarán a Zelia… es obvio que la bastarda vendrá a pie; no es tonta como para usar el aéreotren y sí lo es, también la estaremos esperando allí. Así que rodearan esos malditos bosques hasta que ella aparezca.
—Está bien señor.
Tomhasei rodó los ojos y le dio un trago a su copa llena de vino. Que imbécil era Aeneas por alabarlo por un plan que se le ocurría a cualquiera.
—Aeneas —dejo la copa sobre el escritorio—, la quiero viva y sana.
Era una amenaza en cubierto y ese perro lo sabía. Poco le importaba lo que el hombre hiciera con otras mujeres, pero solo él tenía permitido humillar a esa bastarda.
Quizá no encontraría nunca a la Impura, pero castigaría a Kelleia por eso.
La castigaría a ella y la Impura de su madre cuando la encontrara. Caerían las dos y le rogarían por una muerte rápida. Sin embargo, él no sería tan considerado.
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EL DESIGNIO DE LAS REINAS ✓
Fantasy"La bastarda del rey y un guardia deciden unirse para proteger a una mujer del actual monarca. Juntos iniciarán uno de los múltiples destinos que las estrellas anunciaron hace mucho tiempo atrás". Kelleia Demni Nox siempre ha odiado que la llamen b...