NEVERMIND ♠️Kookmin♠️

18. Siempre

Jungkook últimamente había cogido una rara costumbre: Ver videos Kookmin en Youtube. Rara creía él, lo cierto es que probablemente el mundo se sintiese tentado de verse en un video si fuesen lo suficientemente interesantes como para aparecer en uno. No es que hubiese muchos pero le gustaba verlos, al contrario de esos malditos videos Yoonmin. ¡Menuda farsa! Solo entraba para dejar un no me gusta y un comentario insidioso.

Se reservaba el momento antes de ir a dormir con Jimin, justo cuando decía que iba a ducharse para ver un par de ellos.

Y el destino quiso que encontrase uno con un título tan descabellado que tuvo que entrar a verlo: ¿Jungkook odia a Jimin?

¿Cómo iba él a odiar a Jimin? Era absurdo. Se acomodó bien en la alfombra de su cuarto y le dio a reproducir, confiado por lo estúpido que iba a ser ese vídeo. Pero conforme los segundos pasaban su orgullo se iba desinflando en su pecho. Mierda...

Las primeras grabaciones, fragmentos de entrevistas, sesiones de fotos o fan meetings, habían resultado un tanto desagradables. Había una en la que rodaba los ojos de forma muy irrespetuosa mientras Jimin hablaba. Otra cámara había captado el momento en que pasaba completamente de Jimin, dejándole con la palabra en la boca para irse a hablar entre risas con Taehyung. Otra donde escapaba a la carrera del afecto de Jimin, terminando ambos por correr en círculos al rededor de los chicos hasta que Jimin, con un gesto incómodo, dejó de seguirlo.

Cuándo salió una escena donde Jimin hacia como que le iba a dar un beso y él lo empujaba contra una pared tuvo que pararlo.

Se quedó mirando a la nada, preguntándose por qué mierda Jimin aún le hablaba. Le había tratado como si no fuera nadie, como si no fuera nada. Siempre supo que no trataba del todo cariñoso al más bajito, pero tuvo que verse en un maldito video para darse cuenta de hasta que punto lo había despreciado. De repente se asqueaba de sí mismo. ¿Por qué le había hecho esas cosas a Jimin? Alguien tan puro y tan bueno.

Solo le demostraba afecto, le quería tanto que estaba dispuesto a gritárselo al mundo. De hecho lo hacía, mientras él rodaba los ojos o huía de él.

Capullo, capullo, capullo.

Había maltratado a una criatura buena y desinteresada porque sí. Entró a la sección de comentarios, viendo como la gente discrepaba. Pero no había que ser tonto para darse cuenta de que un alto porcentaje estaba de acuerdo con lo que mostraba el vídeo. Creían que odiaba a Jimin.

Hubo uno en concreto que le dio ganas de escupirle a la pantalla.

"Jimin se lo busca. ¿Que culpa tiene Jungkook si un pesado lo persigue? No me extraña que lo odie, ojalá se vaya del grupo y lo deje en paz. Total, para lo que vale."

Tecleó tan fuerte que le dolían los dedos.

"Jungkook no tiene que tratar así a Jimin, está siendo un puto niñato. Porque en verdad quiere mucho a su Hyung y hacerle cosas tan irrespetuosas está muy mal. Debería aprender a comportarse y valorar a Jimin. Es lo mejor que le ha pasado al grupo y sin él, no serían nada. Y la próxima vez que vengas a poner un comentario asegúrate de tener algo decente que decir y no putas gilipolleces."

Respiró profundo. ¿Se había excedido? Probablemente. ¿Se arrepentía? En absoluto.

Nadie tenía el derecho de hablar así de Jimin, joder. ¿Y si Jimin veía eso? Dios, solo de pensarlo se le dio un vuelco el estómago. Buscó el botón de denunciar comentario y lo presionó, confiando en que YouTube hiciese su trabajo. La culpabilidad lo estaba devorando por dentro. Acostumbrado a ver momentos positivos, el vídeo le cayó como una patada en el estómago.

Salió disparado hacia el cuarto de Jimin. No había rastro de Taehyung. El rubio ya estaba en la cama, mirando el móvil. Corrió el riesgo de que se le cállese en la cara cuando Jungkook entró de un descuidado portazo y prácticamente se le abalanzó. Lo apretó tan fuerte que el teléfono se resbaló a las sábanas.