❝Donde finalmente, Jimin asume que debe dar un paso atrás.❞
Jungkook se pasa la vida ignorando y menospreciando a Jimin, aunque el pequeño rubio haga su mejor esfuerzo por agradarle. Gasta todos sus cartuchos y los vuelve a recargar, todo por el car...
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—¿Jimin?—el chico se detuvo en el primer peldaño. Cuando vio a Taehyung, le sonrió.—¿De dónde vienes?
La sonrisa flaqueó al mismo tiempo que su cara enrojecía.
—De cenar.
Taehyung tardó un segundo de más en preguntar.
—¿Has salido otra vez con el médico?
Jimin bajó el escalón, necesitando hacer algo para aplacar los nervios.
—Sí. Me invitó el otro día, después del café.
La expresión de Taehyung estaba en blanco.
—Ah.
—¿Ah?—Jimin arrugó las cejas, perdido.—¿Qué significa eso?
—No, nada.—Taehyung se encogió de hombros, visiblemente incómodo aunque no quisiera estarlo.—No me lo esperaba, eso es todo.
Hubo un prolongado silencio, Jimin observaba sus zapatos y Taehyung a él. El rubio le miró y encogió imperceptiblente los hombros.
—Es un buen tío.
—Seguro.—reconoció Taehyung, demasiado rápido esta vez. Dudó un instante antes de preguntar.—¿Te lo has pasado bien?
—Sí. Mucho.
—Me alegro.—Taehyung no sabía el por qué de tanta incomodidad. No le gustaba la sensación.—Descansa.—deseó, queriendo por primera vez en su vida alejarse de Jimin.
Jimin lo sintió, aquella energía tirante entre ambos. Tragó en seco y asintió.
—Y tú.
No se quedó a mirar como Taehyung desaparecía, adentrándose en el comedor. No sabía por qué, no tenía motivos para ir ahí, debería subir a su cuarto para cambiarse. Pero esa fuerza repelente que había sentido le hacia querer evitar caminar junto a Taehyung.
Una vez allí, la luz de la cocina se apagó y se encontró frente a frente con Jungkook.
Este se detuvo y Jimin le imitó. Parecía sorprendido de verle. Nervioso, incluso. O eso denotaba su mano, moviendo indecisa la botellita de batido de chocolate que llevaba consigo.
—Hola.—saludó finalmente.
—Hola.
Jungkook apretó los labios de forma imperceptible y el estómago de Jimin se anudó al detectar entre ellos la misma tensión que había notado con Taehyung.
Jungkook le dedicó una sonrisa sin enseñar los dientes y se dirigió a la salida. Jimin alzó las cejas.
¿No iba a preguntarle nada?
Movido por el desconcierto, giró su cuerpo en su dirección y disparó rapidamente.
