NEVERMIND ♠️Kookmin♠️

40. Valor y un sacrificio

Yoongi, Hoseok y Taehyung se encontraban en la sala de descanso esperando a que los miembros restantes llegasen de ensayar. Habían conseguido relajarse un poco y reponerse de la información que Hoseok les había dado el día anterior.

En parte por descansar las horas necesarias y en parte porque Jin había trazado un plan.

Pensaba fingir un accidente durante la practica de forma que acaparase al Doctor Bae Seulki antes de que este pudiese acudir a la cita con Jimin.

El plan se le ocurrió después de que en su camino al baño durante la noche, se cruzase con Jungkook en el rellano de arriba. Ver la cara triste y angustiada del menor cuando este regresaba de la cocina le provocó un dolor agudo en el pecho.

El chico lo pasaba mal, sufría y todos eran conscientes de ello. Necesitaban reconducir la situación antes de que fuese demasiado tarde.

Aunque sabían que la estrategia de Jin era solo una táctica a corto plazo, una que les daba el tiempo suficiente como para esquivar la primera bala. Pero en cuanto el doctor planease la siguiente cita, volverían a estar en el atolladero.

Debían trazar un plan mas exhaustivo.

Y mientras lo hacían, Hoseok había decidido que tanto estrés merecía diez minutos de vaguear por Instagram. 

—Mira Tae.

Taehyung apartó la vista de su propio móvil para prestarle atención y finalmente se acercó a mirar con desinterés la foto que le mostraban. Sus ojos se abrieron ligeramente impresionados y se arrimó mucho mas interesado que hacía unos segundos.

—Joder, ¿Quién es esa?

Hoseok rió por el cambio de actitud.

—Es una bailarina de Instagram. 

—Que guapa.—sacó su propio móvil.—Pásame su nombre.

Yoongi frunció el ceño, mirándole con sospecha.

—¿Para que lo quieres?

Taehyung le dedicó una mirada poco impresionada.

—¿Para seguirla, tal vez?—bromeó, copiando directamente el nombre de usuario del teléfono de Hoseok. Una vez lo tuvo, regresó a su sitio sin apartar la vista un instante de su perfil, con los ojos de Yoongi fijos en todos sus movimientos.

Segundos después, el propio Taehyung alzó las cejas con impresión para musitar.

—Es preciosa.

Yoongi continuó mirándolo con sospecha. Taehyung nunca había mostrado particular interés por ninguna chica. Aunque que finalmente lo hiciera era lo normal, supuso.

Aunque eso no explicaba por qué seguía observándole, sintiéndose repentinamente incómodo. 

Echó un despectivo vistazo al móvil de Hobi, quien seguía dándose una vuelta por el perfil de la bailarina. Había múltiples vídeos de retazos de coreografías interpretadas por ella misma, y entre todos ellos, fotografías del día a día de la muchacha. Tomando un café, con amigos, posando frente a algún paisaje bonito…

Hizo un puchero indignado mirando al frente.

—No me parece para tanto.—alegó subiendo las rodillas al pecho, abrazado a un cojín.

Hobi le miró extrañado. 

Desde el sillón, Taehyung resopló una sonrisa.

—Pues que poco gusto que tienes.—respondió, aun desplazándose por todas las fotos del perfil.

—Quizá es que no soy tan impresionable como tú.

—No soy impresionable.—se defendió, poco interesado, aun sin devolverle una mísera mirada.—Pero se reconocer una tía buena cuando la veo.