| Hasta que te conocí | - [MewGulf]

Capítulo 25

— Malai, te presento a Gulf

La alfa abrió los ojos con sorpresa, esto debía ser una maldita broma del destino. El omega que tanto quería encontrar y matar estaba parada frente a ella con una gran sonrisa. Su alfa gruñó, lo que tanto quería evitar, paso. Los Traititapanagon habían encontrado al hijo que les arrebatado hacia mas de veinte años.

— Es un gusto conocerla, señorita Malai, soy Gulf

Ira y venganza se apoderó de Malai, quería lanzarse a Gulf y matarlo ahí mismo con sus propias manos, quería ver la cara de dolor y sufrimiento de Nouch al ver como le arrebataba la vida de su hijo, quería verla sufrir el mismo infierno que la alfa había vivido al ver cómo el hombre que ama se iba a los brazos de otra a ser feliz. Deseaba tanto hacerla sufrir, y lo haría. El hijo pagaría por culpa su madre. Tanto sería el dolor de Nouch que perdería las ganas de vivir y terminaría matándose, y ahí estaría para Alex, para ayudarlo a superar la muerte de una inútil omega hasta que logrará enamorarlo.

— ¿Malai? — preguntó la omega preocupada al no recibí repuesta alguna. Tenía la mirada fija en Gulf, quién se sentía un poco incómodo por la pesada mirada de la alfa sobre él. —  ¿Estás bien, querida?

Seguramente debía verse patética con la cara pálida y seria, pero esto había sido una maldita sorpresa. Se relajo un poco para poder pensar como más claridad sus siguientes movimientos, si lo pensaba bien el haber encontrado a Gulf había  sido bueno, lo tenía en bandeja de plata para que en cualquier momento le arrebatará la vida, solo debía asegurarse de una cosa, qué ni Alex y Nouch no supieran que habían encontrado su querido Nattharin.

— ¡Sí! — volvió a sonreír saliendo de su transe. — Solo que me sorprendió la belleza de Gulf, los omegas son tan lindos ¡Oh! como me gustaría encontrar el mío, si estás disponible podemos conocernos, no muerdo — le guiñó el ojos

Gulf se sonrojó por las palabras de la mujer, nunca le había coqueteado un mujer, mucho menos una alfa muy bonita como Malai. 

— Yo...

— ¡Malai deja de decir tonterías!, Gulf podía ser tu hijo — le regañó la omega divertida

— Pero ¿Qué crees?, no es mi hijo, ni tampoco tuyo ¿O si? — preguntó divertida, sus palabras lograron lo que quería, Nouch borró su sonrisa de felicidad y se puso sería.

La omega negó con la cabeza, haciendo más fuerte el agarres de su mano entrelazada con la de Gulf, sabía que su amiga no hablo con mala intención, pero le dolía, dolía no tener a su Nattharin con ella, y que Gulf no tuviera su sangre.

— Lo siento querida — dijo la alfa fingiendo arrepentimiento

Gulf frunzo el ceño con molestia, las disculpas de la "señorita Malai" no sonaba sinceras, tantos años de maltratos de la señora GNam y su hija, Jai, le enseñaron cuándo una persona era sincera o cuándo no. Tal vez estaba exagerado, pero no le había gustado en absoluto las palabras de la "amiga" hacia su mamá.

— En verdad lo siento

— No te preocupes, tal vez Gulf no es mi hijo, pero soy feliz con tenerlo a mi lado — sonrió mirando a Gulf

— Aún no soy su hijo de sangre, la familia Traititapanagon, me abrió las puertas de su casa, me ha dando cariño y amor, y solo por eso se han convertido en mis papás, así como yo en el  hijo de ellos — le sonrió

Sabía que estaba haciendo mal en meterse con un alfa, sobre todo si era un mujer, ella podía usar su voz de mando y someterlo, pero él y su omega sentían la necesidad de proteger a la señora Nouch, ¿De qué?, ni él mismo lo sabía pero lo sentía.