cap 12

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Una vez terminamos la cena, nos fuimos a mi habitación, nos acomodamos y mamá nos trae algunas chucherías para compartir, sé que la curiosidad de Fiorella por lo que me regaló Rachid, está en el límite y no me sorprende nada, cuando en medio de una conversación del instituto dice:

-- Bien, ya está bueno de hablar de clases, ahora quiero que nos cuentes ¿Por qué Rachid te dió un teléfono?. -- Aly me ve, pero no dice nada.

--Ash. -- Me acomodo en mi cama y agarro mi bolso, saco el teléfono y se los muestro. -- Que conste que ni yo lo he revisado, él sabe que mi teléfono está en sus últimas y se tomó el atrevimiento de regalarmelo. ¿Qué hay de malo en eso?

Aly, ya al corriente por mi breve explicación me responde:

-- Kei, los hombres nunca dan nada sin esperar algo a cambio, pienso que debes regresarselo.

-- Espera, ¿Por qué? Keira no le a dicho que lo ama o que se va a casar con él. ¿Cierto? -- Ambas me ven.

-- No, no... La verdad no quería aceptarlo, pero admitamoslo esta hermosísimo, me lo quedaré, luego veré que me invento.

La noche transcurrio tranquila, nos acostamos casi a las 12 de la media noche porque al día siguiente había instituto.

****

Los días fueron pasando y así, más solicitudes en las redes, hasta que decidí dejarlo público, me molesta revisar cada perfil, fui subiendo en visibilidad en Twitter y hasta marque una tendencia en #hashtag, el teléfono que me dió Rachid, lo usaba cuando salía de casa, conocí a más personas de manera presencial, les diré algunos nombres:

Hank
Maria
Elianny
José
Daniel

Todos muy agradables, con algunos fui al cine y con otros a comer, mientras estaba sentada en la cafetería del instituto, mi otro teléfono, nombrado pink por su color, me avisa de que me llegó un correo.

Le doy clic y me sorprendo cuando veo una foto mía con Hank, uno de los chicos que conocí hace 3 días, estamos en la fila para entrar a la sala de cine, veo que el remitente es el mismo del correo anterior y en el pie de la foto pone:

Deja de hacer eso.

No sé que responder, ésto me pone los nervios de punta, justo cuando pensaba levantarme llega Miguel.

-- Hola Keira. -- Miguel se sienta juto a mi. -- ¿Qué tienes? Estás pálida.

-- Hola migue, nada. ¿Tú qué tal?

-- Bien. -- Se queda callado y me ve. -- ¿Haz leido algún libro nuevo?

-- Oye no, he estado muy ocupada. ¿Y tú? ¿Cuál me recomiendas?

-- Bueno, te enviaré unos por Pdf, anótame tu correo. -- Me extiende una libreta con un lapicero y se lo anoto.

-- Ya está, estaré pendiente..

-- Vale, Keria, ¿Puedo preguntarte algo?

-- Si, supongo. -- Miguel se mueve incomodo en la silla, hasta que decide hablar.

-- Bueno, es que, el otro día te vi con alguien en la salida y me preguntaba, si era tu novio.

Me le quedo mirando, en mi mente está el recuerdo de Rachid y yo hablando, él saliendo, molesto al verme con otro chico.

-- No, no es mi novio.

-- Ah, vale, entonces. ¿Aceptarías una cita conmigo? -- Me ve, una gota de sudor le baja por la frente y él la quita con algo de disimulo, para que se hagan una idea de  como es Miguel, mide como 1.80 debe pesar como 95kg quizás más, cabello negro y ojos cafes oscuros, aunque es muy amable, no es mi tipo.

Acosada en la REDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora