Prologo.

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En el mundo mágico había una pequeña división.

No. No era por el estatus de sangre.

No. Tampoco se debía a la magia blanca y oscura.

Y no. No era algo que los mantuviera en guerra o desacuerdo.

Simplemente era eso, una división, dos grupos diferentes.

Estos se catalogaban como:

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Magos comunes.

Los que desde nacimiento, o pocos años después recibieron la famosa "marca"

Una marca con las iniciales de quien sería tu pareja destinada, tú otra mitad, tú alma gemela, como quieran llamarlo.

En ocasiones nacías con esta, llegaba a ti los primeros años de tu vida, en tu primera magia accidental, esto podía variar, sin embargo siempre llegaba en tus primeros 11 años de vida. Así tu alma gemela aún no naciera o no tuviera la edad suficiente, la magia lo solucionaba, siempre lo hacía y te mostraba la verdad.

Porque de alguna u otra forma al final siempre estaba allí, era imposible engañarlo. Era tu destino, quien te completaría finalmente y te haría la persona más feliz.
Química inigualable, espera, felicidad.

La magia no se equivocaba, si te unía a una persona era por una razón, todo siempre tenía un motivo.

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Magos rotos.

Magos que nunca recibieron su marca, que no tienen alma gemela, no tienen nadie destinado a ellos.

Un destino cruel en dados casos, sin la posibilidad de sentirte completo nunca, el vacío, la sensación de pesadez, la tristeza de sentirte solo, sin algún motivo alguno por lo cual vivir.

Era el peor temor de un mago, ser un roto, les garantizaba una vida de pesar y dolor.

La mayoría de los casos los pocos magos rotos conocidos terminaban por suicidarse. Siendo llenados por la sensación de pesadez dentro de si, deprimidos hasta el punto de llegar a la muerte, donde finalmente descansan en paz y plenitud.

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Y por último, sin embargo no perteneciente a ninguno de estos grupos base.

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Magos perdidos.

Aquellos que pierden a su alma gemela.

Cuando un alma gemela muere inmediatamente su otra mitad lo siente, siente el dolor, la agonía, la soledad, el vacío, aquel que solo se llenaba con la otra persona.

De igual forma, el brillo habitual en la marca desaparecía, volviéndose opaco y desapareciendo con el paso de las horas, días, semanas o meses. Todo dependiendo de cada pareja, de cada conexión.

Y poco después de que la marca finalmente desaparezca, la otra mitad moría.

Con la promesa y esperanza de recuperar a su amado en el otro lado.

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Todos estos eran conceptos básicos que cada mago, puro, mestizo o impuro debía conocer.
Estos se sabían desde el nacimiento hasta la muerte, se enseñaba en clases y había lugares para buscar a tu alma gemela.

Todo debería ser felicidad, era poco visto magos rotos, y normalmente los magos perdidos tenían la edad suficiente.

El mundo mágico es tranquilo para todos, la promesa de un alma gemela parecía ser suficiente para todos.

Y lo era.

Claro, para la mayoría de ellos.

Sin embargo Harry, a sus 15 años lo sabe. Sabe que no es normal aún no tener ninguna marca, ningún avistamiento, nada.

Porque por más que quiera negárselo. Harry lo sabe, y la agonía le invade cada vez más, incluso si todos parecen ignorarlo.

Harry James Potter está roto.

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*Universo paralelo*
Todos vivos.
Voldemort nunca existió.
La magia oscura no es un tabú por lo que no hay divisiones.

Este es un Regurry (Regulus x Harry)

Y si, es mi tercer historia sobre ellos, tranquilos, vendrán más.

No, no es igual a soulmate.

DIFERENCIA DE EDAD.

RELACIÓN CON UN MENOR DE EDAD.

No promuevo para nada esto, las diferencias de edad no se deben romantizar, son problemáticas y no están bien.

Harry si será varios años menor que Regulus (Aunque este será 5 años menor que Sirius)

Probablemente se lleguen a tratar algunos temas delicados, aún no lo sé.

En fin bebés, los amo, espero les agrade esta idea.

Roto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora