Cry For Me [Tokyo Revengers]

17

«Actualización, Baji no murió, pero tú si... Nos vemos en la otra vida.»

¿Qué?

«Mentira, pero no te duermas o nos va a cargar el payaso. Tampoco es por asustarte pero necesitamos ir a un hospital, en cualquier momento podríamos morir. »

—Kanu, ¿Qué demonios haces aquí? —Cuestionó Draken.

—Muevete, me voy a morir si no te haces a un lado. —Le dije comenzando a sentir un sabor metálico en la boca.

—¿Por...? —Le dio un puñetazo a uno. —¡Ve con los gemelos ahora!

Hanma venía a toda prisa hacia Draken, pero tras sacar la Bibidi Babidi Bu, le piqué un ojo a Hanma y se cayó al suelo.

—¿Qué tienes?

—Nada, me apuñalaron, ya sabes lo de siempre.

—¿¡Por qué eres tan malditamente impulsiva!? —Exclamó y le dio una patada a otro.

La cosa después de eso, fue que Baji estuvo a punto de matar a Kisaki, pero entonces Mikey lo alejó de ahí, como protegiendo a Kisaki.

Fue entonces cuando no pude seguir manteniendo la sangre en mi boca, y la dejé salir quitándome el cubrebocas, luego me quité el gorro. 

—¿Kanu? —Draken me miraba asustado.

—Estoy bien, estoy bien. —Le dije pero por las comisuras de mis labios aún seguía cayendo sangre.

—¡Kanu! —Exclamaron los gemelos tratando de llegar acá.

—Kenchin. —Mikey había bajado. —La pelea acabó.

—Oye oye, no estarás hablando en serio, ¡Apenas estamos calentando! —Dijo Hanma con una mano en su ojo.

Mikey le soltó una patada derribandolo y dejándolo noqueado.

—Necesitamos llevar a Kanu al hospital. —Dijo y después se acercó a Kazutora.

Sentía que me desmayaba.

«No te duermas, no lo hagas.»

¿Estoy muriendo?

«Tecnicamente, pero si logras resistir, podremos llegar al hospital y te salvarán.»

Sentí como alguien me tomaba en brazos y después comenzaban a correr conmigo. Sentía frío por lo que empecé a temblar.

—¿Por qué hiciste eso? —Era Baji. —¿Por qué te arriesgaste por mi?

—Porque te arranque un mechón de cabello. —Dije con diversión. —¿Estamos a mano?

Baji me subió a su moto y pronto arrancó.

—No te quedes dormida, cuéntame de ti.

—Uhm... Estaba enamorada de Draken... Pero él no me hacía caso. Incluso, antes de poder hablar con ustedes me juntaba con Kisaki y Hanma, pero luego de darme cuenta que ustedes no eran malos y que Kisaki mandara a matar a Draken, yo me alejé de ellos. Por cierto, tu cabello huele bonito.

—¿Kisaki mando a matar a Draken?

—Sip, era un plan para llegar al segundo mando de la Toman, está loquito. ¿Puedes creer que lo consideraba mi mejor amigo? Bueno la cosa es que estaba obsesionada con Draken, y hasta pensé en matar a Emma. —Me reí. —Me di cuenta que si no es para mí, nunca lo será, y lo acepté. Por eso volví a la casa de mi mamá y estoy yendo a terapias. Incluso me mandaron al psiquiatra porque pensaron que estaba muy mal que hasta esquizofrenia tenía, pero nop, estoy bien. Ha pasado bastante desde eso, por eso me alejé de todos ustedes. ¡Pero ya estoy bien! Apenas vi a Draken, y ya no me siento rara con él.

—No sé si estás alucinando o me estás diciendo la verdad. —Dijo apagando la moto y luego volviendo a cargarme.

Apenas me puso en una camilla yo perdí el conocimiento.

°°°

«Pues seguimos vivas, porque yo sigo aquí. ¿Cómo estás allá?»

Me siento como la mierda, me duele la cadera y no por lo que me gustaría.

Abrí mis ojitos y entonces pude ver a mi alrededor. Un hospital claro estaba, aún sigo viva.

—¿Kanu, ya estás despierta? —Ese era... ¿Draken?

—Nel, aún estoy dormida. —Dije irónica. —¿Qué pasó?

—Kazutora te apuñaló cuando quiso apuñalar a Baji, la pelea contra el Valhalla acabó con la Toman como ganadores.

—Cool. —Sonreí. —¿Y ya me puedo ir? Momento, ¿Por qué estás aquí?

—Bueno, te lo debo supongo. —Dijo sacando un envase con comida. —Por aquella vez que fuiste a visitarme cuando me apuñalaron.

—Oye no es necesario, aunque gracias. Presta. —Le quité el envase y comencé a comer cuál cerdo. —¿Hace cuanto estoy aquí?

—Tienes un día, luego de la operación dormiste demasiado. Creíamos que habías muerto.

—¿Y los demás?

—Están afuera del hospital. —Dijo levantándose, para después abrir la cortina.

Estábamos como en el primer piso, porque los chicos estaban pegados a la ventana con un cartel que decía: “Re - cupera - té” con un montón de gatitos como adornos.

—Le dije a Baji que así no se escribía. —Bufó.

Saludé a los chicos y luego él cerró la cortina.

—¿Cuánto tiempo voy a estar aquí?

—Por lo menos una semana, y después no deberás hacer ningún movimiento brusco. —Señaló.

—Aish, no quiero estar aquí. Me largo.

Me levanté yendo hacia el bañito, y ahí vi el uniforme del chico que estafé.

—¿De casualidad no hay ropa? ¿Qué me haya dejado mi mamá o algo?

—No, solo ese, úsalo. —Dijo Draken.

Viré los ojos pero aún así me vestí con el uniforme de la Toman, ahora que lo veía, me quedaba muy ajustado. Y tenía un agujerito en la cadera con sangre.

—Pues ya vámonos. —Dije pero apenas abrí la puerta dos cuerpos me regresaron a la cama.

—No vas a irte hasta que estés recuperada. —Regañó Angry.

Me crucé de brazos y luego hice un puchero.

—¿Desde cuándo tiene los ojos de colores?

—¿¡Y mis lentes!? —Exclamé.

—Te los quitaron, y tú mamá se los llevó. Dijo que vendría hoy como a las cinco.

—Ya me voy preparando mentalmente para una regañada.

—No te preocupes Kanu, nosotros hablamos con ella, y en lugar de molesta parecía preocupada. —Dijo Smiley.

Al menos Baji estaba vivito y coleando.