•『 ✶ Love story ✶ 』•

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—¡¿Cómo que Jisung es tu compañero?!

—Baja la voz, no quiero que Jisung se enteré que estábamos hablando de él—. Dijo con sarcasmo.

—Yo pensé que sí.

Minho intentó golpear el brazo de su amigo, pero Hwang se alejó, evitandolo.

—No se puede hablar con vos seriamente.

—Es que me sorprendió la noticia, ¿casualmente ambos se escriben en la misma universidad y les toca la misma habitación?

—Estoy seguro que nuestras madre habrán hecho algo con el tema de la habitación, el resto al parecer sí es casualidad.

—El destino los quieres juntos, o es la ley de la atracción—. Minho lo miró confundido—. Ya sabes, de tanto pensar en algo lo atraes.

Esta vez Hyunjin no pudo esquivar el golpe, y recibió un puñetazo en su brazo.

—Eres un idiota.

—Vamos Minho, es sólo una bromita.

—Es algo serio Hyunjin.

El nombrado rodó los ojos con exageración.

—A ver, ¿cuál es el problema? Tú has di... Oh, espera, ¿no lo has superado?  Soy un idiota, como no me di cuen... 

—Sí genial, descubriste América, ahora, ¿qué debo hacer? ¿Ignorarlo como si no me importará?

—¿Tienes otro plan?— Cuestionó, a la vez que metía doritos a su boca.

Minho negó. 

—Entonces no sé, yo te diría que te confises.

—Tiene novio.

Hyunjin dejó de comer y lo miró sorprendió.

—No lo sabía, pero sí tiene novio, pues olvídate de él. Tú ya no puedes verlo como un simple amigo, y lo sabes.

Minho asintió, y abrió la botella de agua para tomar.

—Conocí a mi compañero de cuarto, es lindo.

—¿Otro enamoramiento?

—Sólo dije que es lindo.

—Siempre empiezas así, y luego tengo que escucharte hablar como enamorado.

—Que mal amigo eres, Lee Minho, extraño a Felix, él si me escuchaba sin juzgarme—. Dijo indignado y se levantó del pasto para irse—. Tengo tus llaves, así que vuelve caminando—. Y antes de que Minho pudiera decir algo, salió corriendo.

Cuando el sol empezó a esconderse, decidió que era momento de volver al departamento.

Se había quedado en el parque, apreciando el lugar y la tranquilidad de este, pensando, y tratando de apagar aquellas ilusiones del pasado que volvían a encenderse por sí solas.

¿Por qué creía que las cosas iban a cambiar sólo por compatir habitación? No cambiaron en un largo año, ¿y van a cambiar ahora?

Odia tanto a su estúpido e inservible corazón que comenzaba a bailar de sólo imaginar que la relación que tenían podría constuirse nuevamente, y le daba la ilusión de que podrían llegar a ser algo más.

¿Por qué tenía que volver a verlo? Justo cuando creía que en serio estaba superandolo, cuando su recuerdo no le quemaba con tanta intensidad como antes, justo cuando iba a comenzar desde cerro e iba a intentar superarlo de una buena vez.

Se mudó a la universidad de Busan porque no eran tan elegidas por los alumnos, todos preferían ir a Seúl, u otras universidad más relevantes, nunca imagino que Jisung elegiría la misma universidad que él y aparte, terminarían compartiendo cuarto.

¿Por qué el destino se esforzaba para complicar su camino? ¿A caso no se daba cuenta que lo estaba lastimado? Poner a Jisung en su camino nuevamente, hizo revivir todos esos sentimientos que nunca se fueron y con ellos vinieron los sentimientos amargos, esos que le recordaban que el menor jamás lo vería con otros ojos.

Nunca tendría el privilegio que tiene Junghoon.

No iba a llorar, no quería llorar, ya estaba cansando de derramar lágrimas por su amistad perdidad, y por esos sentimientos no correspondidos.

Iba con su cabeza concentrada en el piso, por eso, terminó chocando con chico y haciendo que este tiré las cosas que tenía en la mano por el impacto.

—Lo siento, lo siento—. Se disculpó de inmediato, y se agachó para ayudar al chico a recoger las cosas que le había tirado.

—No te preocupes, yo también venía distraído—. Le respondió con amabilidad.

Minho recogió el pequeño reloj, y los últimos dos libro que quedaban en el piso.

Ambos se levantaron al mismo tiempo, Lee colocó los objetos en la caja que llevaba el chico y le sonrió amablemente.

—Perdón de nuevo, venía pensando en otra cosa—. Nuevamente se disculpó, y el chico sonrió.

—Ya te he dicho que no te preocupes, está bien.

—¿Vienes a los albergues?— Preguntó Minho.

—Sí... No sé donde quedan—. Respondió con un poco de vergüenza.

—Yo voy para allá, te puedo acompañar.

—Por favor—. El chico le sonrió, y agarró rápidamente su maleta para comezar a seguir a Minho.

—No me has dicho tu nombre todavía—. Comentó Minho.

—Lo siento—.  Soltó una risa nerviosa—. Soy Seungmin, ¿y tú?

—Minho, un gusto.

Ambos estrecharon sus manos, a la vez que se sonreían.

quieren q Seungmin sea un malote o un buenote  ustedes eligen