•『 ✶ Love story ✶ 』•

F I N A L

Un año después.

Ellos por casualidad se encontraron en aquel parquel.

Todo lo que paso después de aquel primer encuentro fue por las cartas que ellos decidieron jugar, con ellas lograron construir esta bella historia de amor.

En su historia no había errores, nada había sido un error, quizás pudieron hacer las cosas mejores, pero ninguno se arrpentian de todo lo que sucedió.

Aquel distanciamiento que tuvieron, a Jisung le sirvió para darse cuenta de los verdaderos sentimientos que tenía por Minho, y a ambos le sirvió para darse cuenta de que podían vivir sin la prensecia del otro, pero aún así, querían mantenerlo en su vida, no era por un capricho o una dependencia, era más como un plus para agregarle a su vida, un color más al arcoíris y una razón más a la felicidad.

Ellos jugaron su cartas, crearon el camino, a través de jugadas individuales, pero el alzar hizo que se enamoran perdidamente del otro, porque como todos sabemos, nadie manda al corazón y no podemos elegir de quien enamorarnos, cuando los agapornis empiezan a volotear, ya nada los para. Y quizás, el azar había jugado a su favor, porque al final, sus sentimientos terminaron siendo correspondidos por la persona a la cual amaban.

Tuvieron momentos difíciles, como cualquier relación, pero lograron superarlos, haciendo que su relación se vuelva más fuerte, y ahora contaban con un escudo lleno de confianza y amor, dejaban en las manos del otro su corazón, sin miedo.

El amor que se tenían era algo inexplicable, la forma tan linda de mirarse que tenían, como se sonreían, ese destello en sus ojos que aparecía cuando sus miradas se conectaban, aquella aura tan dulce que los rodeaba, a los ojos de cualquiera se notaba que su amor era puro, genuino.

—¡Jisung, no puedes dejar tu ropa tirada por cualquier lado!— Exclamó enojado Minho, recogiendo los calzoncillos de su novio.

—¡Tú eres él que quiere tener sexo en cualquier lugar!

—¡Yo levantó mi ropa después de tener relaciones, Han Jisung!

El menor se levantó del sillón y se dirigió hacía donde estaba su novio, abrazandolo por atrás.

—Lo siento, empezaré a ser más ordenado. 

—Te lo agradecería mucho.

—Honnie...

—¿Qué pasa, Jisung? Tengo que limpiar.

—¿Puedes dejar de hacer cosas? Hagamos algo entre nosotros, vamos a tomar un descanso, después te ayudo a limpiar.

La verdad es que necesitaban un descanso, la última semana los estuvieron saturando con los exámenes y proyectos, ni siqueira tenían tiempo para salir entre ellos.

Minho apoyó el secto de ropa en el piso y se giró, colocando sus manos en la cintura de su pareja.

—¿Qué quieres hacer, mi amor?