-Oye Pedri- le llamó su tío- Levana mañana irá al instituto.
-Vale ¿y?- Cuestionó
-Pues que la cuides, al menos no la dejes sola en su primer día.
-Lo haré si ella me deja ganarla en el "just dance".
-Pero eso sería hacer trampas. -me metí en la conversación.
-Da igual, pero al menos te podré ganar.- sonrió burlón.
-Sí, sí, lo que tú digas...- dije dándole el último bocado a mi porción de tarta de zanahoria.
-¿Ya habéis acabado el postre?- preguntó impaciente Asclepio.
-Va vamos para arriba a ver la peli.- dijo el mayor de los primos.
-No tardéis mucho que de aquí poco nos vamos- avisó la tía de Asclepio.
-Vale mamá- contestaron los hermanos al unísono.
-¿Qué peli quieres ver?- le pregunté a Asclepio.
-La de Zootrópolis.
-Esa la ves cada dos por tres, escoge otra- le ordenó Pedri.
-Pero yo quiero ver esa.- se quejó el niño.
-Pedri, deja a tu primo que vea la que quiera- le regañó Fer.
-¿En serio?- preguntó irónico- Esa y la de Cars la vemos casi siempre que venimos. Que ponga una nueva.
-¿Puedes dejar de quejarte por favor? Pareces un niño pequeño- le regañé yo esta vez. Estaba realmente insoportable, un niño de tres años se comportaba mejor que él.
-¿Perdona?
-Perdonado, calla y mira la peli- Le contesté a Pedri, Fer escondió su risa con un intento de tos.
-Está bien, pero solo por hoy.- se sentó a mi lado, y otra vez estaba entre Pedri y Asclepio, Fer estaba al lado de su primo.
-Si no quieres ver la peli... te puedo hacer las preguntas- le sugerí en un susurro cerca de su oído. Pareció que eso le puso nervioso, ya que se le puso la piel de gallina y se tensó en su asiento.
-Empecemos cuanto antes.-optó por contestar mis preguntas.
-Perfecto-sonreí triunfante a pesar de que él no viera mi sonrisa por la oscuridad de la sala- ¿Por qué no quieres ver la peli?
-¿En serio? ¿Esa es tu pregunta?
-Sí, y te pido que la contestes con sinceridad.
-Pues es obvio, no me apetece ver tropecientas veces la misma película, y luego sabrás por qué lo digo... Ya verás cuando Asclepio empiece a decir los diálogos...- reímos juntos cuando lo que dijo Pedri se cumplió, no me podía creer que Asclepio supiera todo el diálogo de la película.
-SHHH- nos mandó a callar su primo, y nosotros reímos aún más.
-Si no queréis ver la peli, iros a otro lado- dijo esta vez Fer.
-Estupendo- contestó Perdi, se levantó y sin esperármelo, agarró mi mano para llevarme, o mejor dicho, arrastrarme escaleras abajo.
-Mamá, Tito, Levana me ha pedido que le enseñe ls zona. Luego volvemos.-Salimos por la puerta, no podía creer lo que acababa de hacer.
-¿De verdad?- comencé a reír. Él siguió riendo conmigo. -¿Lo único que se te ha ocurrido es enseñarme el pueblo?
-¿Eso cuenta como otra de tus preguntas?- sonrió burlón, pero su cara se tornó seria al ver que nuestras manos seguían cogidas, y seguidamente las separamos.
-No, no es una de mis preguntas. ¿Qué te llevarías a una isla desierta? Solo puedes coger cinco cosas.
-Una escopeta; balas para esta; un mechero para hacer fuego; una prostituta para no aburrirme y una caña de pescar. - dijo sin rodeos.
-¿Una prostituta para no aburrirte? Yo cada día flipo más contigo.- simplemente rio y me guiñó un ojo.
-¿Canción o libro favoritos?
-Mi canción favorita es una de Melendi, no sé si la conocerás, pero se llama "Tu jardín con enanitos", y el libro...- pareció que pensaba- mi libro favorito de momento es el de Orgullo y Prejuicio.
-No te creo, ese también es mi libro favorito. - dije sonriendo.
-Vaya casualidad, libro favorito y una de las películas favoritas igual.- me sorprendió que se acordara de cuando él me preguntó a mí en aquella carrera de motos.
-Aún te acuerdas.
-Como olvidar ese día, casi me tiras al recinto para que me atropellaran.- esta vez fui yo quién rio.
-Tampoco fue para tanto...
-Bueno, dejémoslo ahí- propuso.
-Sí, mejor. ¿Te arrepientes de algo que has hecho en esta vida?- volví a preguntar.
-Sí- respondió con tristeza- Y la verdad es que no hace mucho.-pareció arrepentido, nunca le había visto así antes- Pero no quiero hablar de eso ahora.- asentí con la cabeza comprendiendo.
-Te entiendo, perdón si te ha incomodado la pregunta.
-Tranquila, no pasa nada, sigue, que esta es la última.- me dedicó una sonrisa de boca cerrada.
-¿Tienes novia?
-Algo así, mañana te la presento, ya verás te va a caer genial.
-Vale- dije no muy convencida- Pues mañana me la presentas- le sonreí sin saber que más decir.
-¿Qué quieres ver de Tegueste?-inquirió.
-No sé, tú eres el nativo- me encogí de hombros.
-Pues de momento te enseñaré la zona de los "Crons" los ricos, la de los "Monts" ya tendrás tiempo de verla.-recomendó.
-Vale, ¿tú donde vives en la zona de los pobres o los ricos?
-¿Me has visto? Ovbio vivo en la de los "Crons"- fue el único de los dos en reírse de su broma.
-Pues si no fuera por tu tío, yo sería una "Mont"- le informé.
-Solo estaba bromeando, no era para que te pusieras así de seria.
-Bueno, sigue con la visita, no tengo ganas de hablar sobre clases sociales ahora mismo.
-Está bien, no me opondré ante ti, siempre te sales con la tuya. -su comentario me hizo sonreír un poco.
-Razón no te falta.- me guiñó un ojo y sonrió.
Después de dar una vuelta por la manzana, volvimos a casa, siendo sincera, la visita me pareció bastante agradable, Pedri fue buen guía, nos encontramos con dos amigos suyos por el camino, ambos me saludaron, al parecer el pueblo ya sabía que vendría con mi madre. Eso era algo que no me gustaba, porque a la que hacías algo, ya estaban montándose sus películas, o al menos eso era dónde vivía antes de mudarme a Tegueste.
-Ya hemos llegado- informé a los presentes en la casa. Al parecer, los abuelos y se habían ido, y solo quedaban los padres de Pedri y Fer.
-Menos mal, os habéis demorado mucho, casi nos íbamos sin ti- le dijo Fernando a su hijo.
-Es que nos hemos encontrado con Eric y Unai. Y han comenzado a hablar con Levana- se excusó.
-Eso es mentira, eres tú quien se ha puesto a hablar.- me defendí.
-¿Y de que voy a hablar yo con ellos si ya lo saben todo de mí?.
-¿Y yo? Que a penas los conozco.
-Bueno, dejad de discutir, que parecéis un matrimonio, que si no es por el "just dance", ahora es por quién ha hablado más- se entrometió Fer.
-Despídete, que nos vamos ya. Aparte, si sois como vecinos, podéis veros todas las veces que queráis- Habló esta vez María Rosario.
-Yo no quiero ver más a esta niña- se quejó Pedri como un niño pequeño.
-Como si me importara- me encogí de hombros, me despedí de la familia menos de Pedri y fui a la cocina a por algo de beber. A veces podía llegar a ser un poco infantil, pero a decir verdad, él no se quedaba corto en eso.
-¿Se puede saber que te pasa con Pedri?- preguntó mi madre entrando a la cocina.
-Pregúntale a él, a mí no me pasa nada, estoy tranquilísima.
-Es que mi sobrino es un poco especial con las personas- me defendió David.
-Ves mamá, incluso su tío lo dice. El problema lo tiene él.
-Yo estoy con Levana, el primo Pedri hoy estaba insoportable, no quería ver la peli conmigo.
-Eso es verdad- le apoyé.
-Cambiando de tema, ¿a qué hora empieza el instituto?- inquirí.
-A las ocho, como todos, y termina a las dos y media.
-Perfecto. Pero no sé como llegar.
-De eso no te preocupes, Valentino se encargará de eso, es chofer de la familia, el mismo que nos llevó ayer en la Hummer.
Fui a pasar la tarde bajo el sol en la terraza, me puse mi bikini y llamé a Carmen por videollamada para explicarle todo sobre la llegada, la estancia, pero sobre todo de la comida de hoy. Cuando mi madre me llamó para la cena, colgué la llamada. Después de cenar, fui a mi habitación a dejar todas las cosas listas para el día siguiente y poder descansar. No tardé mucho en coger el sueño, pues después del paseo a treinta grados con un sol abrasador, acabé agotada.----------------------------------------------
¿Que os parece este capítulo? por fin puede saber algo más de Pedri. Espero que os haya gustado.
Muchísias gracias por los 50 votos y las 400 lecturas.
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Una rosa para el recuerdo/ Pedri González
Fiksi Penggemar¿Qué pasaría si viene un completo desconocido a darte una rosa?, ¿Qué pasa si todo resulta ser un reto que le hacen sus amigos? Esta es la historia de Pedro González y Levana López. Este libro no es un cuento de hadas, se convertirá en una historia...