Un amor de verdad #1

Capitulo: 6

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Después de volver del colegio, comer y pasar un poco de tiempo en la casa de la abuela respondiendo preguntas de que me parecía el colegio, como me había ido, etc. subir a la habitación de la abuela, que era la única televisión además del living, para dejar hablar a mama, a mi abuela ya mi tía Carla que era la única de la familia que se había quedado en la casa porque era enfermera y solía tener turnos en el hospital por la noche, así que era una de las personas que más vieron durante el día además de mi abuela y mis primos, Que probablemente preguntaron por ellos pero les respondimos con la verdad "No tenemos ni la menor idea".

Subimos las escaleras, recorrimos un pasillo que daba al cuarto de la abuela y entramos. Lo primero que sentí al entrar fue olor a limón, es la fragancia favorita de mi abuela y básicamente baña su cuarto con esa fragancia.

Cata se sacó los zapatos y se tiró a la cama, imite su acto y ahí estaban las dos acostadas buscando algo interesante que ver.

—No hay nada interesante... —murmuró volviendo a cambiar de canal.

—¿No tienen Netflix? —pregunte gritándome para verla.

Tenía entendido que habían estrenado una película nueva, pudimos verla y evitar que la tele se tilde de tanto que cambiamos de canal.

Pero Cata negó.

Mala suerte.

—Lo dimos de baja hace unos meses -respondió siguiendo cambiando de canal, iba a romper el control de tanto apretar el botón.

—Vas a romper el control... —advertí y ella soltó el control molestando haciendo que rebotará en la cama y casi se cayera.

—No hay un solo programa interesante.. ¡Qué mierda! —se quejó cruzándose de brazos.

—Podemos transmitir por Youtube desde mi celular —comente

Cata negó.

—No se puede... —murmuro molesta.

—Vemos algo desde mi celular y ya está.

Ella asintió y yo me levanté de la cama para ir a buscar mi celular al comedor.

Al llegar pude escuchar a las tres mujeres hablando de una tal Belén y de cómo le permitía no se que a su hijo.

La verdad nunca fui muy fanática de los chismes así que seguí de largo.

Claro de los chismes que no te importan.

Silencio.

Vi mi celular en la barra que divide la cocina y el comedor.

Tenía tres notificaciones, dos mensajes de distintas compañías para que me cambiaran a la suya -Que pesados ​​eran con eso- La otra notificación era de Instagram.

_MaxWilson_ comenzó a seguirte.

Me emocioné al ver eso, es decir Max me interesa para qué negarlo.

Pero... ¿Cómo sabía mi Instagram?

¿Interesa acaso? ¡Te sigue!

Es verdad.

Entre a Instagram y también lo seguí, vi varias fotos de su perfil algunos solos, otras con los que supongo son sus amigos e incluso en varias aparecían mis primos y en otras sus abuelos.

Iba a ver sus historias destacadas pero mi modo stalker fue interrumpido por una tos —Bastante fingida —me di la vuelta y vi a las tres mujeres que estaban chusmeando viendo con una sonrisa que no me gustaba nada.