Marzo
Eran días extraños:
Las tardes de juego eran un verdadero alivio si el Steve participaba en ellas; hacía que lidiar con el asunto de la traición y con lo de Erick, fuera menos estresante.
Desde la primera partida sentí una conexión en nuestra forma tan altruista de jugar: siempre procurándonos y apoyándonos. Y eso me daba una sensación de calidez y hasta cierto punto, cariño: tenemos entendido que es un juego lo que estoy relatando pero no con cualquiera podías hacer esa conexión tan especial en un juego.
Fue la única persona con quien tuve un momento de paz de entre tanta tempestad.
Sabía que aquí había algo más pero aún así quería mantenerme al margen. Aunque por un lado mi novio era cada día más un perfecto idiota:
- ¿Recuerdas el asunto que te dije en la noche?
- Perdóname cariño, no lo recuerdo muy bien, dormí muy poco acompañándote.
- Como siempre; no te acuerdas de nada. Me voy al trabajo.
Ricardo trabajaba en una empresa con turno rotativo: cada dos semanas cambiaban su horario pero era una verdadera tortura el cambio nocturno; ya que le mandaba mensajes desde las 8 pm hasta las 8 am. Terminaba completamente exhausta y mientras él llegaba a su casa a descansar; mi rutina apenas empezaría.
- Bebé, vamos a jugar.
- Claro, pero espera a que termine unas cosas, dame un par de minutos.
- Okay.
- Oye cariño, ¿podemos invitar a amigos? Yo invito uno o una y tú invita a quien quieras.
- Ugh, eso sí que no.
- Pero... el juego es mucho más emocionante si vamos en equipo.
- No, sólo quiero estar contigo.
- Okay.
Me desilusionó demasiado ya que quería que conociera mi amistades y agregar diversidad a nuestra relación, aparte de que me era muy aburrido el solamente convivir con él, no me malinterpreten pero si pasas mucho tiempo con tu pareja llega el momento en el que quierer un espacio para unx mismx se vuelve necesidad. Aunque para ser sincera, no sé si lo hacía por ese motivo o por jugar con el Steve. Si me pongo a analizar: era su compañía la que me traía tanta armonía y risas, creo, que sí quería que sólo se conectara él, se volvió como una adicción disfrazada del mero juego.
Un fatídico día, un amigo argentino streamer comenzó a transmitir y le pregunté que si me podía unir a su cuadrilla de lobby y él con gusto aceptó.
- Vamos cariño, juguemos con Zolack ya que está en vivo y están geniales sus partidas.
- Ugh, está bien...
Me uní y había preguntado si mi pareja se podría unir a lo cual Zolack sin titubear aceptó. Pero era el inicio de una gran problemática; pues Ricardo se la pasó media hora entrando y saliendo del Lobby para no dejarnos jugar.
- Al diablo contigo Ricardo.
- ¿Qué? Es que no me comprendes.
- No, no me chingues... Zolack hasta de paciente se pasó contigo y yo yambién. Estás al tanto de que sus fans esperan a que juguemos y tú nos haces perder el tiempo, deberas que contigo no puedo.
Se salió del lobby y por fin comencé a jugar con lxs amigxs de Zolack.
Mayo.
Día 27 10:40 p.m.
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El Fin de Mi Ocaso [Stephen] (2)
RandomTengo una cortada, física... de las miles psicológicas que pueda poseer. ¿Qué más dá? Ni sé qué rayos es correcto ni qué es malo... dejaré por un momento que el denso y oloroso humo me transporte por un segundo, a un lugar donde sea escuchada sin se...