Tattooed Guy.// Hyunlix

Capítulo 26

Incluso en medio del más vasto silencio su cabeza continuaba estando llena de ruido.

Su instinto primario le indicaba que se largue de allí antes que volver a la mesa a tener que soportar al jodido de Bangchan.

Su paciencia era tan escasa que si volvía a ser provocado por el nadador, ya no le tendría tanta consideración.

Mandaría a la mierda todos los consejos de Lee Know.

Incluso aún sabiendo que Felix estaría allí presente.

Lee Felix, la persona a la que tanto cariño le estaba teniendo...No podría soportar ver su expresión de decepción una vez más.

Por primera vez en su vida, no quería ser el malo de la película. Podría soportar el odio del mundo entero, menos el de su pequeño lirio.

—Porqué todo es tan difícil, mierda.—pateó con enojo una lata abollada de Red Bull para después mirar al cielo tratando de encontrar alguna guía sobre cómo tratar con las personas que le caen demasiado mal.

Y así estuvo la mente del sujeto tatuado maquinando por varios minutos más.

Hasta que se decidió por volver a la mesa con el sigilo de una pantera, pero con el rabo entre las piernas.

—Pero miren quién se dignó a volver.—silbó Minho una vez que Hyunjin retomase su lugar en silencio y con expresión seria. Sus ojos cayeron a la jarra de cerveza que tenía frente a sí.—Te pedí la mejor cerveza artesanal de la casa más un shot de Soju; sé que te gusta esa combinación.

El rubio sonrió apenas mientras vertía el shot en la jarra, sin emitir palabra alguna.

Sabía que en la mesa estaba siendo analizado por varios pares de ojos, a la espera de alguna reacción desfavorable por su parte.

Pero una punzada se hizo presente en su pecho al notar que Felix no le había dirigido ni una sola mirada o frase.

De hecho, parecía entretenido en entablar diálogo con cualquiera que no fuese él.

Le estaba evitando.

—Y así fue como estuve a punto de dislocarme el hombro al entrenar tres horas en el gimnasio sin parar. Me sobrecargué en remo bajo.—terminó de contar su historia Christopher ante la atenta mirada de Jisung y Felix.

—Vos y tu obsesión por tener una espalda grande, hombros redondeados y un trapecio marcado...—Jeongin rodó los ojos mientras daba un sorbo más a la jarra de cerveza colorada que compartía junto a Chan.

Y antes de que pregunten, están en lo cierto: Lee Minho intercambió lugares con Jeongin para permitirle al último tener más cercanía con su hyung.

—Simplemente me gusta estar en forma y tonificado. Algún día llegaré a asemejarme a mi padre en ese aspecto.—suspiró soñador, dejando que sus adorables hoyuelos adornen su rostro pálido.

—Creo que yo debería hacer algo de ejercicio...—admitió Jisung mirando sus bracitos con poca carne.—No mato ni a una mosca con ellos...

—Yo creo que también necesitaría formar algo de músculo...¡Me cuesta abrir hasta las botellas de agua mineral!—Felix palpó sus propios "bíceps" que eran tan solo una pequeña montañita de músculo bordeando su delicada camisa.

—Sungie...—le llamó Minho desde el otro extremo de la mesa. El mencionado conectó sus ojos negros brillantes con los de él.—No necesitas hacerlo si no quieres, estás bien así.—le regaló una sonrisa matadora, con el metal brillante de su piercing del labio resaltando bajo las luces de colores.