1 Chico tatuado.
1 Chico con corona de flores.
Ambos en el mismo instituto.
Exacto, es el cliché que andabas buscando.
COMPLETADA.
⚠️(Me veo en la necesidad de decir que si estos temas hieren tu sensibilidad, evita la lectura) ⚠️
Acepto críticas CON...
-Lixie...Creo que te estás precipitando.-Minho empezó a decir con calma, desde su lugar en la camilla. Sus ojos se habían desinflamado lo suficiente como para encontrarse con la mirada afligida y perdida del pelirrojo que merodeaba por la sala.-¿Estás seguro de que es lo que quieres?
-Es que...¿Ya viste cómo enfrentó a los otros chicos? Incluso si se lo merecían...Fue muy agresivo, como si estuviera poseído o algo así.-su tono de voz se fue apagando como la pequeña esperanza que había depositado en aquella persona especial.
A Felix le dolía hablar así de Hyunjin, o al menos eso es lo que Minho pudo detectar.
Decepción en cada una de sus palabras.
-En estos momentos está enfrentando al director y a la vicedirectora del instituto. Me ha mandado un mensaje diciéndome que cumplirá con tareas comunitarias y asistencia psicológica.-mencionó Minho mientras humedecía su labio inferior para desplazar su piercing como le era de costumbre.-Aún sabiendo ésto, ¿en serio quieres terminar con lo que ustedes tienen?
-Nunca me lo pidió oficialmente...No puedo terminar algo que nunca pudo empezar.-la pequeña sonrisa de Felix era dolida. Se encogió de hombros y, al ajustar mejor sus pulseras con mostacillas de colores, decidió que lo mejor sería llorar más tranquilo en su casa.
No podía permitirse mostrar una imagen débil a un amigo que tanto le necesitaba en aquellos momentos.
-Carajo.-Minho apretó el puente de su nariz en señal de frustración.-Entiendo que es tu decisión Felix, pero quiero que sepas que Hyunjin está en camino para verme. Ya sabes qué tienes qué hacer.
"O eso espero" Minho quiso agregar a la oración. Sabía que eso significaría un golpe muy duro para su mejor amigo.
-Oh...-el corazón del pecoso latió con fuerza. Se sentía nervioso y si no pensaba bien en sus siguientes pasos podría llegar a estropearlo todo.
Aunque algunos malestares serían inevitables.
-Será mejor que me vaya entonces.
Ambos se despidieron con un apretón de manos y un abrazo cuidadoso.
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Y entonces se lo cruzó.
En cuanto Felix iba bajando de dos en dos los escalones del segundo piso tratando de despejarse, se encontró con Hyunjin ascendiendo bastante agitado, como si hubiese llegado corriendo.
Este último se alegró de verle puesto a que no dudó en envolver al chiquillo con sus fuertes brazos.
El calor y el olor tan característico de Hyunjin simplemente calaron hondo en Felix, por lo que sus ojitos volvieron a llenarse de lágrimas.
