Angustia

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"Que vida de mierda tengo"

Es lo que pensaba Dazai en la hora del almuerzo al ver que nadie se acercaba a él para comer juntos, la vida escolar también es un mierda, siempre tienen que excluir a alguien para que sea la estúpida mascota del salón, pero en ese caso, Dazai era la mascota de todo el puto instituto.

Siempre siendo insultado y juzgado a escondidas, escuchando los constantes susurros hablando mierdas sobre él, siendo molestado por estupidos sin cerebro que solo lo buscan para golpearlo y tenerlo como su saco de boxeo, las chicas le hacían bromas pesadas con sus pertenencias y los profesores solo les apremiaban sus actitudes.

Definitivamente un instituto de mierda.

El único lugar seguro donde podía sentirse bien era su habitación y la compañía de esa persona que siempre venia a visitarlo, todo está bien cuando ese chico está dentro de su habitación, siempre escuchándolo y sonriendole, tratándolo como si el castaño fuera lo único en el mundo, con amabilidad y sonrisas que hacen latir el corazón de Dazai.

El nombre del chico es Nakahara Chuuya, lo conoció en una extraña situación, ya que este último estaba intentado tirarse de su balcón y por casualidad el de vendas pasaba cerca y vio como ese chico iba a suicidarse, nunca creyó que intervendría en esa situación pero así fue y pudo evitar la tragedia de ese chico que ahora es por completo su mundo.

Lastima que no pueda decirle que está locamente enamorado de él, lo asustaria y probablemente se alejaría de él, lo entendería ya que es repentino que un chico te diga que gusta de ti siendo el otro del mismo sexo, quizás no podría comprender el por qué y como llego Dazai a sentir esos sentimientos por él, seguro acabaría confundido y asqueado.

Por eso es mejor guardar silencio, tener a Nakahara a su lado y que sea amable con él ya es suficiente.

Pero las cosas podrían salirse de control algún día y los sentimientos explotarán, eso es seguro.

Sacudió su cabeza despejando ya su mente y se dispuso a ponerle más atención a la clase, estar en la escuela es cansador, él solo espera volver pronto a casa y recostarse en su cama para pensar en el pelirrojo de ojos hermosos.

Así culminó su día, algunos le pegaron con un bate a la hora de salida y otras chicas se burlaban de él por ser tan débil al no poder defenderse, Dazai solo dejó que hicieran lo que quisieran, después de todo no le importaba nada de lo que le hicieran a él, más bien, disfrutaba al menos sentir algo de dolor de ves en cuando y ver su propia sangre recorrer por sus brazos y cabeza, la sensación de estar moribundo era interesante y tranquilizador en algún sentido para Osamu.

Se quedó un rato en el suelo después de que lo golpearan y se burlaran de él, viendo el suelo manchado de su propia sangre y como el rojo del piso se extendía cada vez más, sus ojos pesaban y su respiración era débil, "que desperdicio, pudieran matarme si quisieran." Pensó y solo rió por lo estupidos que eran al dejarlo vivo aún, él solo quería dejar de respirar algún día.

Solo era eso, pero unos simples idiotas no podían darle fin a su miserable vida.

Luego de que pasara un rato colocó vendas en las heridas y se levantó con cuidado y despacio, odia el dolor que siente después de haber sido golpeado de esa forma, por eso le desagrada el método que tienen esos estupidos a la hora de atacarlo, nunca lo matan pero si lo dejan con tremendo dolor en todo su cuerpo, es una tortura.

Pudo llegar a su casa a duras penas, nunca pensó que sacar las llaves de su bolsillo dolería una mierda, al menos logró abrir la puerta y pasar con lentitud a la sala de estar, ahí mismo se tumbó en el sofá y soltó un quejido por haberse lastimado las heridas, pero fue imprudente de su parte haber llegado y no haber preguntado si había alguien en casa.

La presencia de un pelirrojo a su espalda se hizo notar hasta que habló.

— ¿Qué demonios te sucedió? – caminó con su ceño fruncido viendo las heridas que tenía el contrario en su cara al haberse volteado hacia a él.

— Oh, Chuuya..., no sucedió nada, solo fue que me caí de las escaleras, no hay de que preocuparse. – giró su mirada hacia otra parte evitando los ojos azulados que poco a poco se volvían oscuros por cada paso que daba.

— "me caí de las escaleras" una mierda, dime la verdad Osamu, ¿Quien te hizo esto? – finalmente se sentó a su lado viendo expectante al contrario que lo miraba con una expresión vacía.

— Ya te dije, solo me caí de las escaleras, no te preocupes cariño. – sonrió para aliviar el ambiente asfixiante que se formó hace rato cuando Nakahara se dispuso a preguntar, en realidad nunca le diría que lo golpeaban todo los días... y sobre todo que él lo disfruta.

¿como pudiera decirle que disfruta que lo golpeen tanto por que lo hace sentir bien? ¿Como siquiera decirle que prefiere estar muerto para ya no tener que vivir todo esto y ser feliz?

Simplemente no puede, no por que es él, es Nakahara Chuuya, la única persona que ama y que no quisiera lastimar por decirle esas cosas tan espantosas que siente de él y de su propia vida.

— ¿Cariño? Osamu, solo dime por favor, me preocupo por ti y lo sabes, llegué temprano para que fuéramos a comer ese cangrejo que me dijiste el otro día ¿no es así? Y luego te veo así... simplemente me siento frustrado de no poder hacer algo si tú no quieres decirme lo que sucede...

— Estoy bien, ¡mira puedo caminar y moverme muy bien! – se levantó y caminó normalmente y movió sus brazos de arriba a abajo como si nada.

Cuando realmente se estaba haciendo daño a él mismo fingiendo una excelente sonrisa mientras que su cuerpo dolía como el propio infierno.

— Aprecio mucho que te preocupes, pero estoy bien y ya lo viste, solo vayamos a comer de una vez. – tomó de la muñeca al contrario y salieron para ir al restaurante que había mencionado antes el castaño.

Chuuya sabía que nada estaba bien, que solo fingía toda esa escena de bienestar y que se esforzaba para no preocuparlo, se sentía tan mal ver a esa persona que pasó casi toda su vida contigo te mienta de esta manera escondiendo su propio sufrimiento para el mismo, cuando Nakahara siempre ha querido ayudarlo y en tal caso compartiera su sufrimiento con él, que no estaba solo y lo tenía, que no se iba a desvanecer o irse de su lado.

Jamás abandonaría a la persona que ama.

¡Hola! Tengan un buen día hoy ♡ gracias por leer.

Soukoku One Shots 𝄢 [BSD]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora