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Senkū decidió ir a su laboratorio y añadir a su expediente en su computador portátil las nuevas teorías dichas por el mentalista, pues todo el sueño y cansancio que tenía se fue momentáneamente cuando Gen dio esa explicación a modo de "demostración", por supuesto que eso no ayudaba a las dudas sobre su sentir que había tratado de resolver desde hace días en entorno al chico de cabellera monocromática.

Tenían aproximadamente de 10 a 15 minutos antes de que llegasen las visitas que, estaba por seguro, no se irían tan rápido como llegarían. Si, 15 minutos porque puede que Kohaku tenga un increíble sentido visual pero en cuánto a su noción de tiempo era en verdad algo en lo que era terrible. Cuando eso pasaba, Gen lo siguió mientras tomaba los últimos sorbos de su bebida y veía cómo el otro estaba tan concentrado en su labor sin tener en cuenta la nube de pensamientos que abundaba ahí.

«al menos no me puso a hacer otra tarea infernal mientras llegan~ odié hacer esas baterías y me sorprendí que quien hizo las doscientas piezas fuera Yuzuriha-chan, esperaba más que se tratara de Chelsea-chan ya que son parecidos en este tipo de cosas~»

—Creo que pasarán años, me haré viejito, moriré y jamás entenderé el significado de tantas fórmulas y de todas las ecuaciones extrañas de las que siempre haces —comentó al aire jugando con el envase vacío y recordó algunos de los temas impresos en los papeles que llevaba a la cafetería aquel día y la data qué había escrito en su computador portátil  hace un tiempo.
—Kukuku. Si claro, mentalista mentiroso. —Gen rió en respuesta— Sabes perfectamente el darme los porcentajes exactos para la investigación en cada una de las encuestas que has hecho así como en tus explicaciones psicológicas y por lo que sé, en Psicología también se usan las matemáticas, así que, tan perdido realmente no lo estás.
—¡¡Eres tewwible Senkū-chan!! —Exclamó con dramatismo y después exhaló—, de acuerdo~ pero dejame decirte que Excel hace casi todo el trabajo por mi y yo solo me encargo de ponerle los numeritos~

Senkū iba a responderle sobre el programa y cómo era que había detectado su pequeña mentira, pero en ese instante tocaron frenéticamente la puerta de la entrada. No pasó demasiado como para que inmediatamente ambos lo identificaran como Chrome.

Gen se quedó ahí apoyado a la pared de la entrada al laboratorio riendo mientras Senkū acudía a abrir la entrada principal poniendo los ojos en blanco pero dejando escapar una pequeña sonrisa divertida.

—¡Senkū, ya llegamos!
—Baja la voz, idiota, ya lo sé. Puedo verlos—se quejó colocando el meñique en su oído izquierdo.

Ishigami se apartó dejando entrar a las tres personas que portaban diferente humor en sus rostros. Primero Chrome; quien entró emocionado al apartamento apenas Senkū dio espacio para pasar, seguido de Ruri con el rostro sonrojado por la vergüenza y detrás de ella, su hermana Kohaku quien portaba una notoria reacción de cansancio.

—Te vez muy radiante, leona. —dijo sarcástico.
—Ya te he dicho que no me digas así —respondió la rubia algo agotada mientras entraba al lugar.
—Lo siento por las molestias, Senkū-san. —Se disculpó Ruri apenada.
—Nah, no te preocupes y bien ¿qué es lo que-

—¡Oh, Gen! —la voz de Chrome sonó e  interrumpió la pregunta atrayendo la atención de los demás. Asagiri rió divertido a la reacción mientras el castaño se dirigía hacia donde él estaba— ¿Llegaste desde temprano?
—Hola Chrome-chan~ oh, pero te equivocas, yo no soy Gen —dijo dejando confundido a Chrome.
—¿Eh? Pero-
—Soy su hermano gemelo... Gin~ mucho gusto~ Gen no soportaba a este científico taaan malo, exigente y antipático, así que vine en su lugar~
—No sabía que Gen tuviera hermanos o gemelos... Nunca lo dijeron en la tele... ¡Que malote! —exclamó emocionado— Sí que parecen mucho y-

My Red String Of FateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora