My Red String Of Fate

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Gen abrió la puerta del relativamente pequeño pero acogedor lugar, nunca antes había venido a comer aquí, ninguna sola vez, pero si Saionji lo había elegido, seguramente la comida sería deliciosa. Su mejor amigo tenía gran gusto para el sazón, puede que tuviese un excelente sentido de la audición demasiado que sería famoso por ello, lástima que por más que le rogara, él jamás aceptaría ir a su programa y menos aún cuando le comentó que se había dado cuenta que era saboteado y prácticamente arreglado. En fin, su sentido del gusto al encontrar buenos sitios para comer no se quedaba tan atrás.

Era prácticamente la hora de la cena y pese a ello el lugar estaba semi vacío, por lo que encontrar la figura de Ukyo y otra más de espaldas en las que solo sobresalía la parte superior de la cabeza, entre las mesas vacías y con poca gente no le fue realmente dificil.

—¡U-ky-o-chan!~ —Saludó en alta voz mientras se dirigía a la mesa donde el rubio y la inusual compañía se encontraban, habiendo observado que los pocos comensales no le darían importancia o simplemente no lo conocían debido al lenguaje corporal que portaban. Seguro esa fue otra de las razones por las que el marino había escogido ese lugar en particular.

Llegó a la mesa en unos segundos, se fijó más a detalle en la persona que se encontraba frente a el rubio y-

—¡¿Eh?! ¿¡Yuzuriha-chan!, qué-? —la risa discreta de los dos en la mesa provocó que Asagiri se interrumpiera a sí mismo aún sin comprender cómo había llegado ahí y sobre todo ¿cómo estaba con Ukyo de todas las personas? esto desató inmediatamente su curiosidad.
—Ya veo, Gen-san es el tan mencionado amigo de Ukyo-kun —la joven de cabello castaño sonrió hacia Ukyo y volteó su vista al mentalista quien le regresó el gesto.
—¿¡Ukyo-chan habla sobre mi?! —Jadeó de falsa sorpresa— How omantic-ray~ claro, es obvio, después de todo ¿Cómo no adorarme? soy un total encanto~ ¿verdad Yuzuriha-chan? —se burló del rubio sacando una pequeña sonrisa de su parte.

—Sí, este inmaduro e infantil de aquí es Gen, Gen ella es Yuzuriha. —rió negando ante la actitud de Asagiri y continuó viendo a Ogawa— Aunque al parecer no hay necesidad de presentarlos, ya que al juzgar por la reacción de Gen y tuya ustedes ya se conocían desde hace tiempo ¿no?
—Si, nos conocimos por un amigo bastante particular— dijo y esto causó gracia en Gen.

No pasaron más tiempo más allá de las supuestas presentaciones, pues Ogawa se levantó de su asiento y se despidió del rubio platinado explicando a Gen que solo había decidido esperar a que llegara la compañía de Saionji antes de retirarse.

El Mentalista asintió y se despidió de la chica haciendo que le prometiese que sería su modelo en prendas llamativas y coloridas a lo que aunque suponía antes lo había dicho jugando y esta vez no sabía a Ciencia cierta tampoco, pero le pareció tierno el gesto y la emoción de Gen que le dio una respuesta positiva aún si eso llegara o no a cumplirse.

Una vez solos en la mesa, Gen se quitó sus accesorios y se sentó inmediatamente cuestionando al rubio sobre su amistad con la joven Ogawa.

—Dejando de lado que me presumes en todas partes como el mejor de los mejores amigos del mundo entero~ —el rubio rodó los ojos— muero de curiosidad ¿Cómo es que conoces a Yuzu-chan? —Preguntó y Ukyo no pudo evitar pensar en imaginarse que si Gen fuera un gato juraría que podría verlo moviendo su cola y  suscorejas acorde a la emoción y rió.
—Lo mismo puedo preguntarte yo, Gen
—pero eso ya te lo dijo ella~ ¡anda, dime! —Saionji suspiró y Gen sonrió victorioso.
—Está bien, ambos nos conocimos hace un par de meses, estabamos juntos en un proyecto de restauración de flora y fauna en una sección del distrito C, elegimos la misma actividad por lo que fuimos en equipo, tratamos de conocernos más y le conté que yo asistía por parte de mi entrenamiento y ella, creo recordar que fue una voluntaria al enterarse del evento. —sonrió y Gen imitó el gesto recordando lo perseverante que era al ensamblar tantas baterías infernales.