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Todos seguían en silencio, viendo atentos al pelinegro vestido con un lindo traje color gris. El chico seguía hipnotizado ante la mirada de su amiga, quien había fruncido ligeramente el ceño ante su falta de respuesta. Luego de algunos segundos tomó aire y con algo de balbuceos aceptó gustoso la propuesta de su amigo Jeon, quien sonrió, sabía que aceptaría. Todos en el set se acercaron para retocar su maquillaje y darle algunos arreglos más, soojin escondía su sonrisa mientras desviaba su mirada al suelo.
-bien, si ya no hay más interrupciones, ¿estan listos? -habló el director, todos asintieron y les sonrió- bien, en 3,2,1
Las luces iluminaban el pequeño set con forma de cafetería, la banda tocaba el inicio de su canción, era la primera vez que soojin la escucharía, una canción de amor escrita por Han Seojun. Las tomas fueron rápidas, no fue difícil ya que Jeon tenía razón, la química desprendía de sus dos protagonistas quienes de vez en cuando reían con tan solo verse, era como si las camaras no los estuvieran grabando, tan natural como ese día en que hicieron brownies en el departamento de la menor, como aquella tarde cuando se dio su tan inesperado reencuentro y compartieron algunos rollos de sushi picante, cuando tomaron en el balcón y Seojun le contó como había arreglado y dicho adiós a su enamoramiento a Jugyeong.
Rápido tuvieron que pasar al siguiente set, con un nuevo conjunto de ropa y un nuevo tema al que deberían adherirse. Esta vez serían una recién pareja de enamorados que tendrían un picnic en un campo de flores, el cual era también otro cuarto adornado. Soojin llevaba puesto un bonito vestido largo de flores, su cabello atado en una coleta floja y un maquillaje menos cargado que el anterior, caminaba de regreso al set mientras jugaba con la tela del mismo vestido.
-soojin -una voz masculina pasos tras de ella la hizo girarse, seojun la veía con una sonrisa nerviosa, luciendo un pantalón negro y una camisa de vestir blanca- ¿como me veo?
-como un chico llendo a su primera cita en un picnic -sonrió-
-llevas el cabello atado -soojin asintió nerviosa mientras se volteaba para seguir caminando- creo que solo te había visto así una vez -la siguió-
-cuando era pequeña mamá solía decir que mi cabello era muy bonito y se veía muy mejor suelto...creo que inconscientemente me acostumbre
Un breve silencio los invadió, habían llegado a la puerta, soojin jalo la manija pero una mano sobre la suya la detuvo, parpadeo un par de veces antes de poder mirar a seojun quien la miraba sin expresión alguna.
-te queda lindo
Un escalofrío recorrió la punta de sus dedos, trago saliva al mismo tiempo que asintió, seojun despegó su mano de la contraria y esta pudo abrir la puerta para darse paso a ambos.
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