𝐒𝐄𝐑𝐄𝐍𝐃𝐈𝐏𝐈𝐀 (𝖲𝖾𝗏𝖾𝗋𝗂𝗎𝗌)

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— ¡No! ¡Me niego rotundamente!— la voz alterada de Sirius se oyó por todo el salón de pociones, era el primer día de clases y ya todo iba mal

— No es lo que usted quiera señor Black, está decidido. El señor Snape le ayudará a orientarlo en clases de pociones— seguido de esto el profesor Slughorn salió de ahí dejando solos a Severus y a Sirius

— No creas que a mi emociona— dijo Snape con su tono de voz de siempre y su expresión era de asco y arrogancia. Salió de ahí dejando a
Black solo

𝝌

— Dijo que cada fin de semana tendría que practicar con Quejicus ya que no podía seguir como los años pasados y si lo hacía no podré pasar este año — Sirius les contó a sus amigos lo que Slughorn le había dicho

— Eso, eso si es algo realmente desafortunado— comentó James

— Oigan, ¿y Peter?— preguntó Remus cambiando de tema

— No lo se, ha estado muy raro desde el verano— dijo James

— Está más nervioso y me he dado cuanta que de la nada desaparece— Sirius miraba a todos lados haber si lograba ver a su pequeño amigo

— Está muy raro— comentó James

— Sí, vamos al salón de transformaciones, tal vez se adelantó a la clase y ya está ahí— Remus se encaminó al salón de McGonagall seguido de Sirius y James

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— Tomen asiento que la clase va a iniciar— McGonagall fue hasta su escritorio y se para delante de él— Pero....— dijo cuando vio que James se sentaba juntos a Peter y Sirius junto a Remus— yo les asignaré su asiento por el resto del mes— Minerva empezó a cambiar de lugar algunos compañeros hasta que llegó a los merodeadores— Potter, siéntese con Pucey, Pettigrew con McKinnon, Lupin con Evans y Black con Snape— los últimos nos nombrados de empalidecieron al oír lo que dijo McGonagall— ¿Qué esperan?

Todos los merodeadores fueron los que se cambiaron de lugar. Sirius se descolgó su mochila del hombro y la dejó caer en el piso, jalo la silla hacia fiera y se sentó de mala gana en ella.

— Muy bien, ya que todos estamos en orden apuntaré algo en la pizarra y quiero que todos lo copien en su cuaderno, esto nos servirá para la próxima clase— McGonagall se dirigió a la pizarra y comenzó apuntar.

Sirius vió cómo Severus sacaba sus cosas, pluma, tintero, cuaderno de forma ordenada y lo colocaba en el pupitre de la misma forma, cuando Severus abrió su cuaderno lo hojeó hasta llegar a una página en blanco donde empezó a escribir. Cuando estaba hojeando Sirius notó que todos sus apuntes eran ordenados un pulcros con una caligrafía muy buena, a pesar de ser cursiva era entendible.

— ¿Te puedo ayudar en algo, Black— la voz de su compañero de a lado llamo su atención— En vez de estar viendo lo que hago deberías prestar atención antes de que tu estupidez que apodere de tu cerebro por completo

— Maldito Queji...

— ¡Black, Snape! Compórtense o los mandare con el director Dumbledore— la profesora interrumpió a Sirius antes de que terminara de hablar

La clase transcurrió sin más alboroto, sólo algunas miradas de desprecio y odio