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Y así fue, el hombre se presentó, me explico a lo que se dedicaba y por que había estado siguiéndome, recuerdo haberlo invitado a mi casa para hablar del asunto y haberme puesto a llorar cuando tuve que hablar de Diana, al final me invitó un café y cada vez que nos encontramos para ser sincera. Creo que el aumento mi vicio con el café, como sea, juré serle sincera y dejarlo registrar mi casa entera si quería, estudios de sangre, lo que sea, estaba dispuesta a someterme hasta a un polígrafo incluso para demostrarle a la familia Bennet que mi intención no era lastimar a Diana y eso a el pareció convencerlo de que no era una mala persona.

Tardé un par de años pero actualmente la familia esta "tranquila" sabiendo que lo que pasó, fue por que "ambas estábamos aferradas a ganar" citando las palabras de Raymond y el jurado, por que así es, el asunto escalo tanto que estuvimos un par de veces frente a un juez.

Y después de todo ese pesado y largo proceso Ray se convirtió en un gran amigo, me presentó a su familia después de un tiempo y resultó que Abi y yo nos llevamos muy bien en nada prácticamente, vi crecer a los chicos e hice amistad con los 3, incluyendo a Artur y a su hija, quienes son como parte de la familia Vega.

~ ¿Qué tengo que hacer para que te comportes Toni? Tu madre esta al final del pasillo! - gritó el hombre cuando entró por la puerta de su hermana.

Al entrar no dijo nada, no hizo nada, solo me miró por unos segundos como si no le sorprendiese que me encontrase ahí después de tanto tiempo sin vernos, me sonrió y me dio un gran abrazo, de esos en los que podría jurar que abrazaba a un osito.

No me mal entiendan, Ray era un hombre alto, un poco robusto debido a su afición por el pay de queso pero eso solo le hacia ver adorable, su nariz y mejillas estaban algo sonrosadas por el sol de los ángeles y le daban un aspecto tierno e inofensivo, casi podrías jurar que el hombre no mataría una mosca.

~ Te estaba esperando Ally - dijo el aun abrazándome y dando algunas palmadas en mi espalda. - tenemos mucho trabajo que hacer. Hola Abi, hola niñas - saludó el hombre a las chicas para después ajustarse el cinturón y echar una mirada a su alrededor - ¿Nos vamos?

...

Y ahí estaba de nuevo, 4:40 a.m. conduciendo a los suburbios pero esta vez con Ray a mi lado en el asiento de copiloto mientras que las chicas con Toni siguiéndonos de cerca en otro auto.

~ ¿Esto de conducir de madrugada es normal para ustedes? - pregunté después de algunos minutos de silencio en el camino, había olvidado que apague la radio y por alguna razón sentía tensión, no me sentía con la libertad de estirar el brazo e interrumpir la paz de la noche y el ruido de las llantas sobre el asfalto con alguna canción o sujeto quejándose del gobierno.

~ Esta es la ultima vez que lo hacemos, veras... Toni metió a Elena en un pequeño problema con "ciertas personas"- y yo reí por lo bajo al notar su intento por mantener en el anonimato a "aquellas personas" - le dije a Artur que los mantendría seguros y arreglaría el problema, es lo mínimo que podía hacer por ellos - dijo para después hacer una pequeña pausa, pensando en lo que diría - no se que voy a hacer con ese chico. - suspiro, el guardó silencio y yo simplemente seguí conduciendo, no iba a preguntar respecto al problema y mucho menos opinar sobre el chico ya que hace tiempo que no se nada de el. - Como sea - dijo el para después tomar una grabadora de su bolsillo - Es bueno volver a verte Ally. - siguió sin mirarme, parecía muy entretenido con su juguete. - Aunque me hubiera gustado que nos viéramos en otras circunstancias.

~ Lo mismo digo, pero por lo que veo has estado ocupado.

~ Te sorprendería la cantidad de cosas que atiendo al día - río él, metiendo un cassete en la pequeña audio grabadora - pero olvidemos eso. ¿Quién fue el desgraciado? - escuche un click para después notar como su voz y aspecto cambio al instante a uno sombrío y serio, daba algo de miedo para ser sincera.

Maldita coincidenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora