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~ De verdad Davis, explícame para que mierda te sirve ese aparato de ve tu a saber cuantos malditos dolares, si nunca contestas mis llamadas y mensajes! - Oli estaba en el recibidor con el teléfono en su mano, parecía bastante molesta y lo único que se me ocurrió en aquel momento fue tomar mi teléfono para verificar lo que decía la rubia.

15 llamadas perdidas de "Olivia Pars"

Ups.

~ Oli, perdón, estaba ocupada, surgieron un par de asuntos y...

~ Mira Ally! Te dije que podía bajar las compras sola! Ya no hay que esperar a mañan.. - dijo una emocionada Dasha quien cargaba varias bolsas, sin embargo ella bajo los brazos confundida al darse cuenta de que estaba siendo regañada por mi "Madrastra malvada" y yo solo quería hacerme pequeña y esconderme entre los cojines del sofá para evitar la furia de mi amiga.

~ Ocupada de compras con tu empleada, claro.. Como sea Ally, tu hermano quería hablar contigo esta tarde, sobre la boda supongo - dijo sacando una libreta para después arrancar una de sus hojas y entregármela - me pidió que te avisara y que lo vieses en su nueva casa hace 3 horas mas o menos,  sin embargo como no te encontraba y Chris me agrada decidí decirle que te había surgido trabajo y no que estabas perdida por ahí con tu empleada, haciendo quien sabe que - ¿eso a que viene? - te salve el trasero y mañana espero mi desayuno después de grabar. - dijo la rubia para después salir de mi casa dando un portazo.

Si que necesitaba aquel desayuno.

~ Olivia Pars, damas y caballeros! - comente mientras caminaba a mi sala de estar y me acostaba en el sofá.

~ No entiendo por que permites que te hable así, es tu empleada, debería respetarte - dijo Dasha sentándose a un lado mío.

~ Bueno, ella no es una empleada cualquiera, es la mejor agente de los ángeles y mi mejor amiga desde que aprendí a atarme los zapatos por mi cuenta.

~ Eso es un buen dato para el libro. - dijo ella y yo solté una carcajada por lo inoportuno de su comentario.

~ Supongo que así es. ¿Tienes hambre o quieres ir a instalarte? - pregunte levantándome para estirar mis brazos un poco.

~ Estoy algo cansada preferiría ir a instalarme -contesto ella sin mas.

[...]

La alarma sonó exactamente a las 5:30 en punto, no quería moverme al igual que cada mañana, pero con la misma fuerza de voluntad de todos los días, me obligaba a hacerlo, me levante de la cama me moje un poco el cabello y me cambie a una blusa mas cómoda, baje las escaleras en total oscuridad y abrí la puerta de la pequeña bodega debajo de la escalera, tome 2 correas rojas y salí de la casa, camine un poco hasta la casa de junto y abrí la puerta del jardín de aquella casa.

~ Newton! Aris! - no, no estoy buscando al filosofo ni al físico, es el nombre de dos hermosos seres en mi vida. Caminaba por el jardín esperando que aparecieran pero no lo hicieron, así que muy a mi pesar entre a la casa por la puerta trasera y como no! ahí estaban los dos flojos.

Newton y Aris al verme entrar se levantaron y salieron al patio corriendo y saltando, mordiéndose entre ellos

~ No les dije que se pusieran a jugar! vamonos ya! - tome las correas y se las puse a ambos border collie, quien al sentirse atados corrieron fuera del jardín prácticamente arrastrándome, y si, así suelen ser mis mañanas, hora y media de paseo por la playa con mis mejores amigos en el mundo, aveces solíamos jugar un poco en el mar pero ese día no era el caso, el agua estaba demasiado fría.

Al terminar el paseo, los devolví a su hogar y cerré la puerta del jardín para que no hubiesen accidentes, una vez que me asegure de eso, emprendí el camino de vuelta a mi casa, al llegar me quite los tenis deportivos e iba a subir a darme un baño pero Dasha estaba en mitad de la escalera obstruyendo mi camino.

Maldita coincidenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora