Cállate/Cállame BL

Parte 36: Beso robado

A la mañana siguiente fui el primero en despertar, además como me sentía con energías como para levantarme temprano, decidí darme un baño y una vez que me vestí, bajé a preparar el desayuno.

No me puse mi ropa de trabajo al nada más comenzar con el día, más bien usaba un pantalón deportivo de color negro y una camisa ancha que me compré por internet, pero los de la tienda no me enviaron la talla correcta, así que ahora tengo una camisa holgada que en ocasiones utilizo en verano como pijama.

La mañana estaba preciosa, mi cocina me encanta justamente porque tiene una vista al exterior espectacular, además hoy me sentía tan feliz que mientras preparaba el desayuno tarareaba la canción de "Con los ojos cerrados, iré tras de él" a medida que preparaba waffles para desayunar.

Ayer oí que Allan quería desayunar esto, por ende, como modo de consentirlo preparé la mezcla y las puse en la máquina donde se cocinan, incluso mientras se cocinaban, cortaba frutas para ponerle encima.

Sin duda, era la mejor mañana del mundo, últimamente estoy muy feliz, lo cual me genera cierta preocupación, siento que cuando estoy feliz demasiados días seguidos, el destino se encarga de golpearme en la cara y decirme "No todo es color de rosas, gilipollas" (El destino soy yo muajaja)

No quisiera gastar todo mi nivel de felicidad, pero no puedo evitarlo, además para variar cuando estaba sirviendo los platos, sentí los cariñosos brazos de mi amado quien comenzó a besar mi cuello dándome en el proceso los buenos días.

Por su culpa no puedo evitar sentirme feliz, incluso me siento embobado por la vida que estamos llevando últimamente, casi como si fuésemos unos recién casados.

—Que delicioso se ve...—me dijo alejándose un poco de mi cuerpo mientras posicionaba sus manos en mi cintura.

—Sí, también corté fru...

—Y no hablo de los waffles— terminó de decir, haciéndome entender que se refería a mi trasero.

—Bobo— dije sintiendo mis mejillas un poco calientes, lo que obviamente lo hizo reír— ¿no tuviste suficiente con lo de anoche? —le pregunté.

—No...—respondió besando mi cuello de manera lujuriosa.

A decir verdad, yo tampoco tuve suficiente, quiero un poco más, anoche consiguió que mi cuerpo deseara más que una ronda, pero como tenemos que trabajar nos obligamos a dormirnos temprano.

Lo bueno es que conseguimos despertarnos temprano, así que aproveché que nuestro hijo aún no despertaba con tal de besarlo lujuriosamente, de hecho, me giré y a medida que nos besábamos mi mano bajaba hasta su entrepierna mientras que sus manos apretaban mis nalgas por debajo de la ropa.

Yo deseaba apresurar nuestras acciones, me daba miedo que nuestro hijo nos interrumpiera, así que deseaba tenerlo dentro cuanto antes, pero en los planes de Allan no estaba seguirme el ritmo, más bien se arrodilló frente a mí y bajó mi ropa con tal de complacerme con ayuda de su boca.

Es obvio que lo consiguió, me gusta mucho cuando utiliza su boca, además la vista que me regala es demasiado excitante, ahora mismo está completamente concentrado en darme placer, puedo ver a través de sus ojos la determinación, parecía que buscaba impacientarme por la manera en la que jugueteaba con su lengua rozándola seductoramente por mi erección.

Hacer esta clase de cosas en la cocina es sin duda inapropiado, pero hasta chupando mi erección se ve sexy, aún más cuando deslizó sus dedos por mi entrada y comenzó a juguetear con mi cuerpo maliciosamente.

—Ah...—suspiraba mientras sujetaba mi camiseta para que no le estorbara— nnnh...—gemí levemente sintiendo un segundo dedo que irrumpía mi interior— mi amor, apresúrate o Luther despertará— le dije ansioso.