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El ruido de sus tacones bajando las escaleras hicieron eco en la habitación, ignorando eso se dirigió a la cocina en busca de thomas, lo había buscando en el piso de arriba y no había logrado encontrarlo.
Cuando abrió las puertas llamo la atención de un hombre. Este la miro con un notorio miedo en su mirada, cosa que se le hizo extraño, pero decidió ignorar.
—No quiero molestarlo, pero, ¿Vio a tommy?—Consulto intentando ignorar lo raro que se sentía todo. Él hombre asintió señalandole la puerta que daba a otra parte de la cocina.
Una expresión de confusión adorno su rostro ¿Los hombres con dinero entraban a la cocina de sus hogares? Con una sonrisa divertida atravesó el almacén, hasta dar con otra puerta. La cual abrió topándose con una escena muy desagradable para cualquier persona.
Toda la habitación estaba manchada de sangre y no de los animales que iban a ser servidos para la cena. Un hombre sin vida en el piso y thomas amenazando a otro de los cocineros.
—No era algo que debías presenciar, athenea.
El hombre paso por su lado casi corriendo con tal de alejarse de ese lugar.
—Bueno, el rojo te queda lindo y es un color navideño.—Se acerco al mafioso que estaba completamente manchado en sangre.
—¿Preparaste las cosas para charlie? Nos iremos a small heath. Ve por él, por los regalos y yo me encargare de esto, llamare a johnny.
Asintió levemente a todas las palabras de tommy. Solto un suspiro antes de hablar.
—Creo que debería avisarle a mi madre que no volveré a casa por algunos días..
—Si, deberías avisarle que ahora eres una jodida peaky blinder.
—¿De qué hablas? Tom, yo no soy una peaky blinders.—Intento frenarlo, pero él no la dejo, estaba seguro de sus palabras. Todo era demasiado rápido, pero tal vez así era la vida de thomas y al parecer iba a tener que acostumbrarse a eso.
—Si, ahora lo eres.—Afirmo poniéndole su boina a la joven frente a él.— Ve a hacer lo que te dije, nos vemos en la entrada.
Asintió nuevamente antes de irse de la cocina yendo a guardar los regalos del pequeño en una bolsa, llamo a su madre para avisarle que no volvería en unos dias sin darle muchos detalles prometiendole que cuando volviera le explicaría todo, agarro la mochila del niño y por último fue a buscarlo, agarrándolo entre sus brazos.
Al bajar las escaleras se encontro con thomas, en la entrada de la casa. Ya con una ropa limpia y no llena de sangre. Él la ayudo con las cosas del pequeño.
—¿Ya es navidad?—Pregunto un charlie adormilado recibiendo una negación por parte de la pelinegra.—Mamá..— Murmuro suavemente al ver un cuadro de grace.
Ella agarro el cuadro entre sus manos para el pequeño, él amaba a su madre y no se le hacía fácil no tenerla, lo minimo que podía hacer era llevarle una foto.
—Thomas, ¿Estaremos bien?— Se atrevió a preguntarle cuando subieron al auto. Si bien, era un chica valiente nunca había estado expuesta a un peligro tan evidente y tan inesperado. Eso le generaba cierto miedo.
—Eso espero, athenea.
Asintió nuevamente acurrucando al pequeño entre sus brazos intentando convencerse mentalmente sobre a todo lo que se estaba exponiendo desde ese preciso momento.
Ya no había vuelta atrás.
Ya no solo era una diseñadora, ahora era una jodida peaky blinders.
Era tan sorprendente, que parecía un sueño.
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DANGEROUS BLINDERS ©
Fanfiction▫ Tᴀɴ ᴅɪsᴛɪɴᴛᴏs, ᴘᴇʀᴏ ᴛᴀɴ ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴍᴇɴᴛᴀʀɪᴏs. Tᴀɴ ᴜɴɪᴄᴏs, ᴘᴇʀᴏ ᴛᴀɴ ʟᴇᴊᴀɴᴏs. Uɴ ᴀᴍᴏʀ ǫᴜᴇ ɴᴏ ᴇsᴛᴀʙᴀ ᴅᴇsᴛɪɴᴀᴅᴏ ᴀ sᴇʀ. Dᴀɴɢᴇʀᴏᴜs ʙʟɪɴᴅᴇʀs: Completa. Dᴀɴɢᴇʀᴏᴜs ʟᴏᴠᴇ: Completa. ᴴⁱˢᵗᵒʳⁱᵃ ˢⁱⁿ ᵉᵈⁱᵗᵃʳ ᴾʳᵒʰⁱᵇⁱᵈᵃ ˢᵘ ᶜᵒᵖⁱᵃ ᵒ ᵃᵈᵃᵖᵗᵃᶜⁱóⁿ. Cᴏᴍɪᴇɴᴢᴏ: 12 ᵈᵉ ˢᵉᵖᵗⁱᵉᵐᵇʳᵉ...