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「ATHENEA.
El hecho de tener el recuerdo de mi madre siendo agarrada por los italianos, aun en mi mente, es agobiante. Y no puedo sacarlo de ahí, lleva torturándome hace horas en un bucle sin fin del cual no logro escapar a pesar de intentarlo.
Ver su mirada en mi mente, era algo aterrador. La podía ver, mirándome con sus ojos verdes mientras las lágrimas recorrían su rostro —manchandolo con su maquillaje— a la vez que su garganta se desgarraba a causa de los gritos en busca de piedad, piedad que no iban a darle.
Aun sentía el mismo escalofrío recorrer toda mi espina dorsal hasta llegar a la punta de mis pies, ese mismo escalofrío que sentí en el momento que mi tío apoyo su mano sobre mi hombro para alejarme de la situación que estaba sucediendo en la sala de estar de mi hogar, en la misma que hace algunos meses había estado manchada con la sangre de mi padre, sangre que yo misma ayude a quitar del piso.
"¿Donde esta el cuerpo?"
Recuerdo que me hicieron esa pregunta durante meses, buscaron todas las formas posibles para hacerme hablar; pero, a pesar de no llevarme bien con mi madre, era algo que ambas prometimos llevarnos a la tumba y iba a cumplir con esa promesa.
—¿Segura que se encuentra bien?
—¡Nea! Maldición, ¡niña! ¿Qué pasa contigo?
Cuando la voz de linda, junto a las maldiciones de polly llegaron a mis oídos, sacandome de mis propios pensamientos y recuerdos del pasado, pestañe varias veces antes de enfocarlas con claridad.
—Si, si. ¿Qué paso?—Pregunte sacando mi mirada de ellas, agradeciendo que se hayan alejado de mi cuando escucharon mi voz.
—Estabas como muy sumida en tus pensamientos.. ¿En qué estabas pensando tanto?—Consulto linda sentándose adelante mio.
—Bueno, pensaba en un vestido.. Soy diseñadora.—Mentí.—Suelo quedarme pensando en los diseños para luego poder dibujarlos con más detalle.
Sentí la mirada fija de polly sobre mi persona, antes que una libreta cayera frente a mi seguida de un lápiz. Mire las cosas para acto seguido mirar a la persona que las había arrojado sobre la mesa.
—Dibujalo, quiero verlo.—Pidió mientras se prendía un cigarro. La mire sin poder creerlo, mi trabajo no funcionaba de esa forma en lo absoluto.
—No funciona así, polly.
—Tú lo dijiste, pensabas en un vestido para dibujar. Ya lo pensaste, ahora dibujalo.—Insistió.—Total, ya tienes la idea. No vas a tardar mucho en verdad.
Mire la libreta, y solo por el hecho de cerrarle la boca. Agarre la libreta buscando una hoja en blanco para así comenzar a trazar las lineas para algún vestido, tampoco era algo tan difícil pensar en un diseño.. Mientras no sea algo muy elaborado era algo muy fácil.
—Nea, vamos.—La voz de thomas sonó en mi mente, pero en un segundo plano. —¿Qué hacen?—Consulto al no obtener respuesta de mi parte.
—Esta intentando demostrarle a polly que no mentía cuando dijo que estaba pensando en un vestido.—Esa fue la suave voz de linda.
—Ahí lo tienes, cuando tenga tiempo libre.. Puedo hacertelo, como un regalo de mi parte.—Sonreí deslizando el dibujo sobre la mesa para que ella pueda verlo.
—Nea, este no es un vestido adecuado para nadie.. Excepto que sea para una puta que busca llamar la atención.— Ella contraataco.
—Pues, veras.. Tenemos pensamientos muy distintos y es una lastima, sabes, yo creo que es un vestido muy lindo.. Tal vez, en un color rojo quedaría muy bien.—La mire aun manteniendo mi sonrisa.
—Nea, vamos.—Insistió thomas viendome con seriedad. Lo mire antes de levantarme para ponerme mi abrigo y así poder irnos.
