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Mientras desayunabamos tranquilamente y hablábamos de cómo había estado la vida de charles en los últimos años. Llegó thomas en compañía de kyle y duke, a quien no conocía pero que de lejos se notaba que era un hijo más de thomas.
Kyle se sentó a mi lado, abrazándome fuertemente. Sus ojitos seguían rojos y unas ligeras ojeras se marcaban bajo los mismos. Me dio un no se que en el pecho y si no hubiera sentido la mano de thomas apoyarse sobre mi hombro, se me hubieran caído las lágrimas frente a todos.
-Athenea, te quería presentar a duke. Mi hijo mayor.-Nos presentó y una sonrisa curvo mis labios, viendo al joven que estaba frente a mi. Él tomó mi mano y dejó un beso en ella, regalándome una sonrisa ladeada antes de mirar a su padre.-Ella es athenea, la madre de kyle.-Murmuro mirando a su hijo.
-No te fíes, es ladrón.-Murmuro kyle junto a mi, son soltar mi mano.-Me quito mi reloj sin que me diera cuenta, es demasiado escurridizo.-Aseguró mirándolo.
Lo mire con una sonrisa divertida, viendo la picardia en la mirada del contrario.-Devuélveme mi pulsera, por favor. La compre en milan y no es barata.-Pedí notando la falta de la pieza en la mano que él me había besado.
-Es una pulsera muy linda. No he visto de estas por aquí.-Murmuro viendo la pulsera que tenía entre sus manos. Tom le dio una mala mirada por su falta de modales, pero a mi me seguía pareciendo algo inocente y divertido, sabía que no estaba robandome de verdad.
-¿Te gusta?-Pregunto viendo la pulsera de oro con piedras azules en sus manos. Él asintió.-Te la regalo, te darán buen dinero por ella.-Le asegure recibiendo una mala mirada por parte de thomas.
-Ella me cae bien, no como la otra. ¿Se quedara con nosotros?-Pregunto duke con diversión.
-¿La otra?-Pregunto kyle.
-Lizzie.-Contesto thomas.-Ella era mi esposa hace unos años cuando duke llegó a mi vida.-Comento intentando no ponerle mucha importancia al tema, como si le generará incomodidad hablar sobre eso.
Y no lo había pensando, ¿Donde estaba lizzie? ¿Qué sucedió?
-¿Te vas a quedar?-Pregunto nuevamente duke, logrando que todos me queden mirando esperando un respuesta.
-Unos días seguramente y luego volveremos a casa. Kyle tiene que volver al colegio y con sus caballos, no puede dejarlos allí.-Murmure mirando al pequeño junto a mi, quien asintió mirándome.
-Tienes una casa aquí.-Recordó thomas. Sabiendo que era donde habíamos estado viviendo los últimos meses cuando decidimos volver a las afueras de birmingham.-¿Por qué no vuelven ahí?
-Kyle estudia en Italia.
-Lo hablamos después.-Contesto seriamente antes de irse, subiendo las escaleras para poder ir a su oficina en la planta de arriba. No sabía que teníamos que hablar, la decisión ya había sido tomada y no podía cambiarla.
-Gracias, athenea. Nos vemos después, si necesitas algo, no dudes en buscarme en lo del tío charlie.-Murmuro duke con una sonrisa ladeada antes de irse de la casa.
-Claro, adiós.
-Yo tengo que salir a hacer unas cosas, también los veo luego.-Sonrió charles, despidiéndose.
-Nos vemos después.-Le sonreí viendo como se iba. Cuando estuvimos a solas, puse mi mirada en el ojiazul que se había quedado conmigo.-¿Como estas, cariño? ¿Te sientes bien?-Consulte.
-Estoy bien, me siento un poco extraño pero estaré bien.. es parte de la vida supongo.-Murmuro en un tono bajo, mirando sus manos.
