Capítulo 2

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La banda hoy hará tributos de otras bandas, es genial. Solamente cuando están de gira tocan sus propias canciones. Ashley yo llegamos a casa y descansamos un poco. Me dormí y luego Ashley me levanto muy bruscamente. Empezó a golpearme con una almohada.

Me meto en la ducha, y me lavo solo el cuerpo. Salgo y me seco, luego miro mi armario, en busca de ropa limpia. Me pongo un short de tiro alto, la verdad me queda un poco corto, pero da igual. Unas vans negras y una blusa un poco holgada de los lados, trae la imagen de Nueva York en el centro. Arreglo mi cabello rojizo, dejando que caiga sobre mis hombros. Me maquillo un poco y cubro mi cuello con perfume. Estoy lista.

Salgo a la sala de estar y me encuentro con Ashley, vestida con un bonito pantalón ajustado y una camisa que hace que muestre su ombligo, se ve muy bonita. Cuando me ve, abre sus ojos.

-¡Te ves hermosa!

-Gracias. - Sonrío.

-¿Por qué no te vistes así de bonita siempre?

-No lo sé. - Me encojo de hombros.

-Bueno, Dan no podrá venir a traernos. Así que conducirás tú.

-¿Qué? ¡No! Que flojera. - Le doy mis llaves.

-No, no, no. Manejas tú. - Me devuelve las llaves.

-Demonios, pero al regreso, manejas tú.

-¡Sí! - Chilla. Tomo mi bolso.

Salimos abrazadas del apartamento y nos subimos a mi auto, y nos vamos a The Song. Pongo música a todo volumen y cantamos, dejamos que nuestras voces se eleven y floten en el aire. Llegamos antes de lo esperado, no había tráfico ahora. Me estaciono y nos bajamos.

Entramos a The Song y el primero en saludarme es Javier, quien va vestido en un short color café y una camisa manga larga blanca. Se ve bien. Realmente, a The Song nadie viene formalmente, aquí todo es playa, sol y arena, literalmente.

-¡Arabella! - Me abraza y yo lo abrazo, también.

-Javier, ¿Cómo estás? - Nos soltamos. Le sonrío.

-¡Excelente! Una banda muy famosa tocará hoy, aquí.

-¡Genial! Eso es muy bueno.

-Sí. Discúlpame, tengo que resolver unos asuntos.

-Claro, adelante. - Se despide con un beso en la mejilla.

Ashley yo nos vamos a sentar en la barra. Wow, han remodelado el lugar completamente para la banda. El escenario está preparado para un buen número de público.

-¿Qué se les ofrece, preciosas? - Pregunta el chico que está detrás de la barra.

-Dos cervezas. - Dice Ashley.

-A la orden. - Dice el guapo chico, guiñándome. Al cabo de tres minutos, nos trae nuestras cervezas.

-¿Has visto a Dan? - Le pregunto mientras doy un sorbo.

-No, está muy ocupado con la banda.

-Mmmmm.

El karaoke empieza y pasa la gente a cantar. Hoy no tengo ánimos de pasar. No es por nada, pero da risa lo mal que canta está gente.

Pasa una hora de karaoke y es hora de que la banda toque. Las luces se apagan completamente y es cuando Ashley toma mi mano y me jala, y quedamos frente al escenario. Y es entonces, que la música empieza.

-Dark Souls es una de las mejores bandas, en serio - Ashley chilla.

Dark Souls.

La batería empieza y luego, las guitarras. Justo cuando el cantante empieza a cantar, las luces se encienden, mostrando la banda. En un dos por tres, estamos rodeados de fans, de personas comunes, que bailan y cantan.

Touching Your Dark SoulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora