Tomo entre mis manos mi guitarra, sintiendo la madera y lo cómoda que es. Toco notas y trato de cantar, dejar que mis palabras fluyan, pero no sale nada... no pienso en ninguna letra u oración buena que pueda utilizar. Mi mente se encuentra seca, mi corazón revolotea... ¡Espera!
-Mi mente se encuentra seca
Mi corazón revolotea
Canto junto a una suave melodía. Mi mente rebusca más palabras, rebusco en mi corazón y sé qué si canto lo que mi corazón siente, terminaré llorando o algo así. Dejo la guitarra a un lado y me levanto, voy por un vaso de agua. No hay agua, no hay jugo y menos leche, la nevera se encuentra vacía. Estoy sola en casa y necesito que alguien vaya al supermercado... yo no iré, claro que no, no saldré de casa... aún no. Suspiro, no hay ni siquiera para comer, ¿En qué momento me acabe todo? No es que solo pasara comiendo, primeramente. Frustrada, giro y me siento en el sofá. No veo televisión, solo me estoy ahí sentada, sin hacer ni mirar nada. No sé cuánto tiempo pasa, pero no lo soporto, tengo mucha hambre. Debo ser fuerte y tener la fortaleza para salir. Camino ha mi habitación y me cambio de ropa. Tomo dinero y me encaminó a la salida, a paso lento, con miedo. Abro la puerta y bajo los escalones, como si fuesen de fuego, camino. Salgo del apartamento, siento la brisa sobre mi rostro, siento lo que es salir después de unos pocos días. Miro a todos lados, en busca de cualquier cosa sospechosa que haga que regrese, nuevamente, pero no hay nada. A lo lejos, diviso a una chica... que cada vez, se acerca más, me doy cuenta que es Ashley.
-¡Arabella! - chilla con emoción y me abraza.
-Hey. - la saludo. Nos separamos.
-¿Qué...? ¡Estoy tan alegre de que hayas salido!
-Sí... - vacilo, incómoda.- ¿Vas tú a comprar?
-¡No! Ahora que has salido, no entrarás. Venga, yo te acompaño.
-Bueno...
Empezamos a caminar en silencio. El supermercado no queda muy lejos, por lo que llegamos en quince minutos. Tomamos una canasta y empezamos a tomar cualquier cosa que queremos y se nos apetece. Escojo fruta, galletas, unos cuántos chocolates, un litro de leche, lácteos, pan de caja, cereales y jugos.
-Toma, iré por jabón y otros.- dice, dejándome con su cartera de mano y móvil.
-Vale.
Veo a Ashley alejarse. La gente a mi alrededor se encuentra concentrada en sus compras, ni siquiera notan mi presencia. Me hago a un lado, para que la gente pueda pasar más rápido y no ser un obstáculo. Mi mano empieza a vibrar y me doy cuenta que el móvil de Ashley. Miro la pantalla: James. ¿Por qué James llama a Ashley? Sin dudarlo dos veces, contesto y llevo el móvil a mi oreja.
-¿Sabes dónde está Arabella? Estoy en el apartamento y no está, estoy preocupado. - Habla sumamente rápido sin dejarme espacio para hablar yo.
-¡James! Cálmate, soy yo, Arabella.
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Touching Your Dark Soul
RomanceLa música los unía... pero había algo más que se creaba entre ellos: amor. Sin darse cuenta, empezaron a amarse profundamente, evitando los problemas... pero todo es tan complicado. Porque ella es agua y el aceite. Porque ella es tierra y el cielo...