::Cap 99:: Perdiendo La Cordura

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***** ADVERTENCIA ANTES DE LEER *****

- Este capítulo tiene un poco de contenido +18

- Leer bajo su responsabilidad

Más nada que agregar, disfruten el capítulo ♡.
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El rubio levantó su vista posando la en mi, para luego mirar a Reggie y Alex por unos largos segundos y volver a mi.

- Les parece si lo conversamos más tarde? En un lugar más tranquilo... y a parte me encuentro trabajando por ahora... -  Dijo serio mirando al rededor donde se veía mucha gente transitando. Los chicos y yo nos miramos unos segundos y todos asentimos en señal de que estábamos de acuerdo.

- Si... está bien... te daré nuestra dirección para que vayas y así platicar más tranquilamente y de paso te mostramos nuestra música - Dije con una sincera sonrisa.

- Me parece bien! - Dijo Nick para luego sacar su celular del bolsillo del pantalón, y tendermelo Rápidamente anoté la dirección y mi número.

- Cuando llegues, me llamas - Dije devolviendole el aparato. Él asintió, asentimos igual y éste comenzó a tocar otra vez.

Caminamos de regreso a casa callados, cada uno sumido en sus pensamientos. Al llegar después de 40 minutos caminando Reggie se sentó en uno de los sofás exhausto  mientras que Alex y yo nos disculpamos y fuimos a su habitación, Regg nos miraba con una sonrisa coqueta en su estúpida cara haciendo que pusiera los ojos en blanco.

Cuando perdimos de vista al castaño, no pude evitar tomar la mano del ojiverde quien se encontraba mirando hacia adelante guiando el camino. Al estar frente a esta abrió la puerta lentamente y entró dando una zancada, cosa que me hizo reír. Entré detrás de él para cerrar detrás de mi, éste salto un poco en dirección a su cama y se dejó caer sobre esta mientras yo observaba con atención todo lo que hacía sin darme cuenta que me había quedado parado como un bobo junto a la puerta. Alex al notar que no lo seguí me mira.

- Ven - Dijo con una sonrisa y golpeando dos veces la cama.

Sin más hice lo que pidió sin antes mirar la hora en la mesita de noche, eran las tres de la tarde y me senté en posición de indio junto a él a la altura de su cabeza. Éste se movió un poco y puso su cabeza entre mis piernas mirándome con una sonrisa. Le sonreí de vuelta y con ambas manos le acaricié con delicadeza el cabello, moviendolo de un lado a otro y en todas direcciones lentamente, éste cerró los ojos al instante aún con una sonrisa en el rostro y eso me hizo recordar cuanto le gusta que le acaricien el pelo, no pude evitar reír por lo bajo.

Lo miré por varios minutos contemplando su belleza hasta que noté que tenía la boca entre abierta, su rostro sereno, su pecho subiendo y bajando lentamente y su cuerpo completamente relajado. Se había quedado dormido con mis caricias y se veía muy tierno, a pesar de que su cara estaba al revés. Me provocaban unas ganas enormes de querer besarle, sentir sus labios otra vez contra los míos de la forma más tierna y arrebatadora posible, sentir que la respiración y el alma se me van del pecho porque él se las lleva consigo, sentir que me quiere y no solo como amigos sino como algo más.

Y sin darme cuenta me encontraba a unos centímetros de su cara, con el espacio suficiente como para contemplar su rostro. Miré sus ojos que aún estaban cerrados, su nariz y luego su boca. Estaba a punto de cometer una locura pero a estas alturas ya no me importaba. De a poco me fui acercando hasta parar cerca de sus labios que aún se encontraban ligeramente abiertos. Saqué mi lengua y lamí con delicadeza el labio superior para hacer lo mismo con el inferior. Me alejé un poco para verlo nuevamente a la cara, esperando alguna expresión y movimiento de su parte para hacerme saber que sintió lo que hice, pero nada sucedió. De nuevo, me acerqué más a sus labios e hice exactamente que hace unos segundos atrás, solo que ésta vez mucho más lento y torturador.

Ésta vez Alex se removió un poco en su lugar, aún con los ojos cerrados y con el ceño levemente fruncido... Bien, estaba funcionando... seguí con mi juego de mi lengua en sus labios para sellar nuestros labios con un beso y de a poco, el ojiverde fue correspondiendo, haciendo el beso rítmico y lento, sintiendo los labios del otro de a poco. Mi corazón late con fuerza y las ansias de besarlo desenfrenadamente se hacía presente pero quería disfrutar el momento, del vaivén de nuestros labios tan lento que hacía desear más y más.

Luego Alex sube sus manos y las pone en mi cuello, haciéndome suspirar y botar aire por la nariz pesadamente. El beso se volvía de a poco más intenso abriendo un poco más nuestras bocas y con cuidado me abrí paso con mi lengua hacia su boca chocando con la suya, éste suspira y hace lo mismo que yo empezando un vaivén con nuestras lenguas mandando ráfagas y ráfagas de corriente por todo mi cuerpo. Y Alex ejerce presión en su agarre y me atrae mucho más a él.

Yo en respuesta lo beso mucho mas intenso, devorando su boca, soltando muchos más suspiros al igual que él. Mi respiración estaba mucho más agitada que hace unos minutos atrás y todo lo que sentía era nuevo, esas ganas de comerle boca y sentir que a pesar de estar besándolo no era suficiente, querer mucho, mucho más hasta saciarme por completo.

Y creo que Alex lo notó porque de a poco se fue incorporando haciendo que nos separemos unos instantes para ponerse frente a mi en la misma posición que yo.

Nos quedamos mirando por unos segundos, ambos con la respiración agitada a más no poder. Su pelo desordenado, sus pupilas más dilatadas de lo normal, sus mejillas ligeramente rosadas y sus labios completamente rojos e hinchados, se veía tan jodidamente sexy, y con ese pensamiento en mente me acerqué a él tomándolo con una mano de la nuca para acercar su rostro al mío y besarlo otra vez con la misma intensidad que hace unos instantes. Alex correspondió el beso de inmediato también poniendo sus manos en mi cuello para empezar a jugar con mi pelo y tirando de este haciéndome suspirar cada vez más.

Las sensaciones que tenía en el cuerpo jamás las había experimentado antes y se siente tan malditamente bien que no quiero que termine.

Luego, inconscientemente puse mi mano en el muslo de Alex ejerciendo presión, haciéndolo suspirar y soltar un leve gemido en mis labios y o dios mío que se sintió bien escucharlo, eso me impulsó a comerle la boca con muchas más ganas mientras la temperatura de mi cuerpo se elevaba poco a poco haciendo que mi entrepierna creciera levemente. Sentí como mi ojiverde retiraba sus manos de mi cuello lentamente sin dejar de besarme y pasar sus piernas por encima de las mías, levantarse con el impulso de sus manos y posicionarse encima de mis pies mientras me rodeaba con sus piernas mi cintura para quedar mucho más cerca. Ahora si sentía mucho más calor, tenerlo así de cerca me volvía loco, me hacía perder los sentidos y no podía parar de besarlo.

Me encontraba acariciándole la espalda por encima de su camiseta con una mano y la otra lo atraía mucho más a mi por la cintura. Alex me tomaba por el cuello con ambas manos sin dejar de besarnos ni un segundo. Quería sentirlo mucho más, sentir su piel, escucharlo suspirar, gemir contra mis labios me estaba matando y la verdad yo no me quedaba atrás, también soltaba muchos suspiros y unos cuantos gemidos de vez en cuando, estaba perdiendo la cordura y no quería parar, tampoco sabía cuanto tiempo había pasado, solo sé que esto se siente bien, muy bien.

Hice el agarre de la cintura más fuerte y lentamente fui recostándolo aún con besos. Con mi mano izquierda me apoyé en la cama y la otra la puse en la cadera de Alex ejerciendo presión haciendo que éste nuevamente soltara un gemido, nos separamos levemente unos instantes y ambos sonreímos para volver a besarnos. Ahora era Alex quien me acariciaba la espalda por sobre la tela haciéndome suspirar.
Alejé mi rostro y lo miré a los ojos, luego bajé lentamente con la mirada de Alex en mi, atento, y lentamente besé su cuello mirándolo de reojo. Éste cerró los ojos y botó aire pesadamente en señal de que le gustaba, seguí besándo, lamiéndo y mordiendo su cuello haciendo que gimiera unas cuantas veces.

Acerqué mi cuerpo un poco más al de Alex haciendo que nuestros sexos se rozaran y ambos gemimos en respuesta. Subí mis besos y nuevamente nos besamos con ansias, haciendo crecer el deseo mientras me movía para hacer fricción y soltar muchos más suspiros, estaba perdiendo la poca cordura que tenía y ya no podía parar. Alex bajó sus manos hasta llegar al borde de mi camiseta y de a poco adentró sus menos por ella tocando mi espalda, sus caricias eran tímidas, como pidiendo permiso pero cuando las sensaciones aumentaban éste se aferraba mucho más a mi. Hasta que sentí como mi celular que se encontraba en mi pantalón vibraba.

- Mierda! - Exclamé separándome un poco de mi ojiverde para luego sacarlo del bolsillo y ver la pantalla.

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