Encantos Ocultos

Capitulo 2

(Alexis Ferrer en multimedia)

Al día siguiente me desperté cerca de las 11 de la mañana. Limpié rápidamente mi cuarto y bajé a desayunar, después de regresar de la tienda había arreglado un poco más mi habitación dándole más forma y el resultado era sumamente encantador. Por fin sentía que era mi habitación, compré unos muebles en forma de ataúd, coloqué tres junto al clóset en donde coloqué todos mis libros.

También compré un escritorio con su respectiva silla y otro mueble para poner mis máquinas para tatuar por que, sé tatuar y hacer piercings.

-Buenos días preciosa prima - dijo Paula mientras fumaba un cigarro de sabor cereza en la cocina

-Bueno días culona- respondí con flojera - ¿Ya desayunaste? - pregunté al verla tan cómodamente fumando

-Por supuesto que no, estaba esperando a que te levantarás para desayunar- levanté las cejas- mentira, desayuné cereal con leche desde hace rato. Pero hay más cosas por si quieres revisar - respondió amablemente

-Gracias- respondí abriendo el refrigerador. Como no tenía mucha hambre saqué el yogurt natural - ¿Y eso que tienes yogurt? Eres intolerante a la lactosa - pregunté mientras me servía un poco

-Aja y tú también y eso vas a desayunar -respondió ignorando mi pregunta. En fin, ¿Para qué insistir?- Piqué un poco de plátano para ponerlo en mi yogurt para después agregarle un poco de granola. - Ah si, esta noche tendremos una peda bien electrosatanica para que vayas desayunando más rápido - agregó con tranquilidad

-¿Pará que voy a desayunar rápido si la peda es en la noche? Si es las 8 como buenos mexicanos van a llegar hasta las 11 no mames- dije obvia mientras desayunaba

-Pues si querida Ale- se acercó abrazándome por la espalda- pero resulta que tenemos que hacer brownies mágicos y eso es tardado. Más aún por toda la gente a que vendrá hoy. Es tu fiesta de bienvenida todos quieren estar aquí - dijo animada

-Todo eso suena a la gloria. Pobres de tus vecinos, esta noche no se duerme- me burle a carcajadas

-Por eso ni te apures, la mayoría de las casas están solas. Nuestros únicos vecinos son los cogelones y esos me la vienen guanga. - respondió felíz. Me reí por las palabras que usó para expresarse.

-Bien, manos a la obra porque esta diosa tarda mucho en arreglarse- dije sonriente terminando mi último bocado. Paula aplaudió de la emoción dando pequeños saltos de felicidad.

- Aquí esta la mantequilla, los demás ingredientes están en la alacena- dijo sacando la mantequilla mágica del refrigerador. Poco a poco sentí la emoción crecer en mi abdomen alumbrándome el rostro.

En las siguientes horas nos dedicamos enteramente a hacer los brownies mientras recordábamos historias de la infancia, nos poníamos al día sobre nuestra vida así como también hablábamos sobre los dramas familiares después de la muerte de nuestros abuelos. Una vez que la gran cantidad de brownies mágicos estuvo completa, ambas corrimos a bañarnos y a nuestras habitaciones a arreglarnos. Quería estar sumamente cómoda ya que es peda en casa y terminé poniéndome un bustier, pantalón negro y mi chamarra de cuero con mis botas estilo combat.