En la oficina
Sakura observaba la vista desde la gran ventana de la oficina. El horizonte de la ciudad se extendía ante ella, prometiendo una belleza aún más deslumbrante cuando llegara la noche.
—¡Wow! Desde aquí se puede ver toda la ciudad. Seguro que de noche se ve aún más bello —comentó Sakura con asombro.
El abuelo sonrió, complacido por su reacción. —Me alegra que te guste la vista. Mañana comienzas a trabajar.
—Está bien —respondió ella, asintiendo con determinación.
Unos golpes suaves en la puerta interrumpieron el momento.
Tock, tock... Tock, tock...
—Adelante —dijo el abuelo, girando hacia la puerta.
La puerta se abrió lentamente, revelando a un hombre joven de porte elegante y seguro.
—Buenos días, abuelo. Tanto tiempo sin verlo —dijo Shaoran, con una sonrisa cálida.
El abuelo se levantó de su asiento para estrecharle la mano. —Solo fueron unos meses. Bueno, te presento a mi bisnieta, Sakura.
Sakura se quedó paralizada al ver a Shaoran, su rostro se volvió pálido al instante.
—Mucho gusto en conocerla, señorita Sakura. Mi nombre es Shaoran Lin —dijo Shaoran, extendiendo su mano con una sonrisa cortés.
—Mucho gusto en conocerlo —respondió Sakura, esforzándose por mantener la compostura. En su mente, (¿Qué hace aquí Shaoran? Mejor finjo no conocerlo para que el abuelo no descubra la verdad todavía).
Antes de que pudieran continuar la conversación, la secretaria asomó la cabeza por la puerta.
—Señor, lo necesitamos un momento.
El abuelo asintió, volviéndose hacia Sakura y Shaoran. —Está bien, voy enseguida. Mientras tanto, pueden conocerse mejor.
—Sí, claro —respondió Shaoran, con una leve inclinación de cabeza.
—Nos vemos en un momento —dijo el abuelo, saliendo de la oficina.
El silencio se apoderó de la habitación cuando el abuelo se fue. Sakura, manteniendo una expresión fría, se volvió hacia Shaoran.
—Si intentas hacer algo... yo...
Shaoran levantó las manos en señal de paz. —Tranquilízate, solo quiero hablar contigo.
—¿De qué quieres hablar? No tengo nada que decir —dijo Sakura, dando un paso atrás mientras él se acercaba.
Shaoran dio un paso hacia ella, obligándola a retroceder hasta que su espalda tocó la pared. Inclinándose hacia su oído, susurró suavemente:
—¿En serio no tienes nada que decirme?
—Que eres un bastardo por lo que me hiciste hace unos meses —respondió Sakura, con los ojos llenos de furia contenida.
Shaoran bajó la cabeza, sus ojos mostrando un atisbo de arrepentimiento. —Te he estado buscando para pedirte perdón y compensarte por lo que hice.
La ira de Sakura se encendió más intensamente.
—¿Piensas que un simple perdón puede arreglar las cosas? ¿Y en "compensar" crees que fui una prostituta? —gritó ella, empujándolo—. Mejor me voy.
Sakura intentó salir de la oficina, pero Shaoran la agarró del brazo con firmeza.
—¿Qué haces? ¡Suéltame! —exclamó, forcejeando.
ESTÁS LEYENDO
☆♡Cómo puedo convertirme en Ceo ♡☆
Romansa🌹 La historia de Shaoran 🌹 Shaoran es un joven empresario frío y distante, marcado por la tragedia de haber perdido a su prometida en un accidente automovilístico hace tres años. Ocupa el puesto de Vicepresidente en la compañía familiar, pero su a...
