Rescate

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Caminé por un buen rato alejándome mucho más pero supuse que estaba en lo correcto tratándose de prácticamente un secuestro. De repente me espanté por las vibraciones en mi bolsillo...era mi celular y al revisarlo me notificó llamadas entrantes de Yeji: se había percatado de mi ausencia. Me limité a contestarle para únicamente decirle un: "estoy bien, volveré pronto" y colgarle de inmediato para así seguir con mi camino.
En medio de la nada me detuve a pensar un poco y me llegó un recuerdo que me ayudaba bastante. Lisa me había dicho que cuando Woojin huyó por primera vez luego de la golpiza que recibió por Yeji, se rumoreaba que se había ido a esconder a las afueras de la ciudad...iba en buen camino ya que para allá estaba caminando.

Seguí caminando y algunos autos pasaban por mi lado pero no les daba importancia. Finalmente pude encontrar algo iluminado en medio de la nada, se trataba de una especie de kiosko así que me acerqué.
-buenos días señorita-me saludó un joven.
-¿días?-pregunté por la obvia oscuridad del cielo.
-bueno, técnicamente. Son las 4am-informó invitandome un vaso de agua.
-llevo cerca de 3 horas caminando-mencioné aceptando la invitación.
-¿qué hace por aquí?
-busco a mi novia. Te lo diré porque quizás puedas ayudarme con algún dato...un tipo se la llevó ayer y no he podido auxiliarla como se debe. Creo que deben estar por estas zonas-informé.
-pues depende qué tipo, y cómo es tu novia-agregó.
Se los describí y el chico se quedó pensando dándome más esperanza.
-pues si precisamente anoche, bueno ya en la madrugada un auto se estacionó cerca de aquí. Un par que kilómetros al norte, iban un chico y una chica que parecía dormida, el punto es que el auto ocasionó un atrancón allá porque se detuvo de golpe. De ahí no sé más, pero te podría asegurar de que estás cerca-dijo algo emocionado por su hallazgo y yo me levanté de inmediato. Agradecí y corrí para avanzar un poco más, de la nada recibí una nueva llamada, esta vez de Lia.
-estoy bien...-quise hacer lo mismo que con Yeji.
-RYUJIN MALDITA SEA VUELVE AHORA MISMO. NO TE ARRIESGUES, HARÁS MÁS GRANDE EL PROBLEMA.-habló preocupada pero a la vez molesta.
-Jisu voy por mi chica, por favor no llames a la policía, estoy en la carretera pero tengo todo controlado. Pronto volveré con Yuna-finalicé y colgué para no dejarla hablar más.

Caminando unos metros más me encontré con un auto, estaba estacionado afuera de una pequeña cabaña que no tenía nada de transitado alrededor. Me escondí atrás del mismo automóvil y traté de inspeccionar lo más que pude el lugar, parecía no haber nadie adentro pero algo me indicaba que ahí era: mi sudadera se encontraba dentro del auto, la misma que le di a Yuna la noche anterior. Quise esperar un poco ya que todo indicaba que no se encontraban adentro debido a la falta de sonidos.

Pov Yuna

Woojin me tenía atada por completo, incluso puso una cinta en mi boca impidiéndome gritar.
En cuanto me dejó algo inconciente por la cachetada que recibí de su parte puso en marcha el auto pero metros después se detuvo causando un atrancón. Él mismo salió a arreglar su problema mecánico y en seguida estuvimos de nuevo andando hasta que llegamos a una cabaña, empecé a gritar y fue ahí cuando me colocó algo en la boca para callarme y evitarse problemas.
No me ha dado de comer ni de beber pero si ha quitado la cinta para besarme a la fuerza, incluso me ha manoseado causándome asco y terror. El asegura que pronto me desatará para tener nuestro momento de placer. Estoy llorando a más no poder y sigo preocupada por Ryujin ya que quedó noqueada, quizás nunca me encuentren aquí porque estamos prácticamente en medio de la nada...estoy condenada.

Se me acerca y me quita la cinta para comenzar con sus asquerosos besos, cuando finalmente se separa para tomar aire aprovecho para gritar ganándome un golpe de su parte, pero ahí llega, vino por mí y está bien, entra directo a salvarme, no se fija en nada por la furia que lleva consigo y le da un golpe a Woojin en la nuca llevándolo directo al piso.
-¡mierda eres tú!-habla el susodicho levantándose.
Ryujin me toma de la cintura levantándome y me empuja hacia la esquina del inmueble haciéndome chocar pero supe que todo era para protegerme.
De repente ella recibe un golpe directo en la cara sacándole sangre de la nariz pero ella reacciona igual con el mismo tipo de golpe hacia la cara del contrincante. Se mantienen en violento choque causándose heridas de todo tipo mientras yo me encuentro totalmente inmóvil por mis amarres y por la situación.
Con suerte pude aflojar un poco mis manos y aproveché para romper la cuerda y así desatarme el resto del cuerpo.
-te dije que no te le acerques-habló Ryujin de repente bastante calmada y al ver la escena noté que Woojin se encontraba el piso. Estuve por encontentarme pero en seguida el tomó una barra metálica del suelo y la golpeó haciendo que cayera.
-¡Ryujin!- me acerqué ganándome la mirada de ambos pero ella se distrajo demasiado siendo tomada por la espalda.
-Yuna mi amor, lárgate de aquí-habló demasiado tranquila como si nada estuviera pasando.
Retrocedí unos pasos algo en shock y el apretó su agarre haciendo que Ryujin se queje del dolor, por lo visto la había tomado del brazo dispuesto a rompérselo.
Me acerqué de nuevo pero al mirarla supe que sus deseos se mantenían en que me largue del lugar, no le hice caso del todo y me alejé pero únicamente para buscar algo con lo que pueda ayudarla.
Ella seguía quejándose del dolor pero Woojin la sometía bastante tomando el control de todo...incluso volvió a golpearla en la cabeza pero esta vez con la barra y supuse que sangraría pero en vez de acercarme y causarle más angustia me apresuré en mi búsqueda.

Encontré una navaja y me acerqué a ellos sigilosamente para así atacarlo como se debe. Lamentablemente él se dio cuento y me obligó a tirarla con su brazo libre ya que con el otro sostenía a Ryujin; en medio de tanto caos se me hacía imposible encontrarla de nuevo.
-¡eres una gran puta, lo único que quieres es que te coja...tendrás que esperar mientras me deshago de esta basura!-gritó dirigiéndose hacia mí y vi como Ryujin lo regresó a ver inmediatamente y con su brazo suelto que no era su dominante agarró fuerza y lo golpeó en la cara obligándolo a soltarla y a irse directo al piso.
En cuanto lo derribó pude notar que Ryujin traía su brazo completamente roto, algo que me asustó mucho. Ella se enderezó y se dirigió hacia mí agarrándome con su único brazo y me abrazó, Woojin se levantaba lentamente pero no tuvo tiempo de reaccionar puesto que unas sirenas se hicieron presentes y unos policías entraron casi derribando las paredes.

Mates(2Shin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora