Paralyzed - Jeff the Killer

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Un mes después.

Ha pasado mucho desde la noche en que creí ver al asesino, los terrores nocturnos cesaron, eso fue de gran alivio, aunque mis padres de todos modos me obligaron a seguir con la psicóloga. Los asesinatos en la pequeña ciudad han aumentado, muchas familias decidieron dejar la ciudad, haciendo que cada vez mas parezca un pueblo fantasma. El nombre de Jeff the Killer es conocido por todo el mundo, hay muchas teorías de su aparición, como que es un alma en pena, o que sus padres eran asesinos, cosa que es totalmente descabellada, por supuesto, para mi, ya que yo si conocía su verdadero origen. Estamos a 12 de junio, el calor es inminente y todos utilizan de escapar a la playa u al bosque. Este ultimo siendo un grave error, hablando del tema, muchas zonas del mismo han sido clausuradas, y ya saben porque, el asesino suele merodear por esas zonas y darles pequeños sustos a los acampantes. Todos saben que le dicen "Jeff the Killer" pero además de las autoridades nadie sabe que pertenece, o pertenecía, a la familia Woods.

Mi vida ha vuelto en muchos aspectos a la normalidad, muy pronto empezaría de nuevo las clases, no me preocupo mucho en realidad, mientras que esa persona equis, no vuelva a mi vida todo correcto.

-Hallo, tierra llamando a Adeline.- Bryon movió su mano frente a mis ojos intentando sacarme de mi repentino transe.- ¿No escuchaste nada verdad?- Asentí avergonzada. Comenzando a tomar un leve rubor, cosas mias.- Bien, te estaba comentando que hoy tengo una cita.

-¡Una cita!- Exclame dando un respingo, cosa que asusto un poco a mi hermano.- ¿Es en serio? Woah, esa no me la esperaba.

-¡Hey! Que yo soy muy guapo, es decir, todas me aman.- Admitio con cierto aire de superioridad. Negue con la cabeza riendo bajo.

-Lo se hermanito, lo se.- Aclare mi voz.- A lo que me refiero es que, tu casi nunca sales con nadie, no eres del típico chico que tiene novias.- Este se llevo una mano al pecho y tiro un chillido al aire.

-Me sorprende que me conozcas tanto, tendría que alejarme un poco de ti.- Le propine un golpe leve en el hombro.- Auch, golpeas fuerte para tener esos brazos de alfiler.- Bromeo.

-La nutricionista dice que subi tres kilos de peso.- Admiti.- Me felicito, y me dio una paleta.- Mi acompañante rio.

-Eres unica Ade.- Miro su movil.- Es tarde tengo que empezar a arreglarme.- Se levanto del sofá de un salto.

-Pero si es...- Mire el reloj en la pared.- Son las siete, es muy temprano.- Lo acompañaba con la vista mientras subia las escaleras.

-Lo se, pero esto es importante.- Se rasco la parte trascera de su cabeza, cosa que lo hizo muy tierno. Como un pequeño que esta en problemas y su madre lo regañaba.

-Eres peor que yo, ¡Y eso que soy mujer!

-Ay si.- Hizo un pequeño bailesito, muy... Raro. Y termino de desaparecer de mi vista.

Suspire y me dediqué a dormir. El calor era sofocante pero la pequeña brisa que entraba por la ventana me relajaba. Y pude dormir un poco en el comodo sofá.

**

Desperte por el timbre, solté una maldición, ¿Qué? Estaba idiota. Me levante medio dormida, intentando alisarme el cabello que estaba totalmente revuelto. Abrí la puerta y lo que vi me sorprendió de sobremanera: la nada. Realmente no había nadie, ni nada en la puerta, lo que si note, es que ya estaba oscureciendo. Negué con la cabeza un poco molesta, pensando que eran los niños molestos.

Subi las escaleras lentamente, entre bostezo y bostezo, terminé de subirlas. Entré a mi habitación y Prendí mi laptop. Entré al navegador y busque ¿Cómo es Jeff the Killer? Las miles de respuestas que encontré me sorprendieron. Había de todo, historias bien hechas, aunque falsas, historias rarísimas, aunque esta fue la que se llevo mi premio:

Jeff te observa durante 5 horas sin parpadear (obviamente no tiene parpados). Se te acerca por la espalda y te susurra su típica frase "Go to Sleep" te mata y durante cinco minutos baila la macarena sobre tu cuerpo. Luego te arranca los ojos y te corta las mejillas, haciéndote una hermosa sonrisa...

Rei, ante la estupidez, claro ellos nunca se habían encontrado con el, ellos nunca estuvieron a punto de ser matados por él, y los más importante, ellos nunca fueron sus mejores amigos. Había personas que aseguraban que no tenía parpados, pero claro que tiene parpados, si no fuera asi, no podría ver nada, ya que los ojos se le secarían, y seria básicamente ciego. Luego de ese articulo bastante extraño, encontré otro de una joven de 21 años que decía haber sobrevivido al ataque del famoso asesino, ¡Habia sobrevivido a Jeff! Vamos, es algo importante, aunque no creo que siga mucho tiempo con vida. Él siempre vuelve.

Luego de varios minutos de investigación, acompañado con sorpresas y risas -con las incoherencias que escribían las personas sobre mi ex mejor amigo-. El sueño me atacó y no tuve otra opción que dormir, de nuevo, si. Duermo mucho, muchísimo.

En pocos minutos me quede profundamente dormida, otro error que cometí a lo largo de mi vida.

**

Desperte sobresaltada, mi corazón estaba latiendo rápidamente y tenía una mala sensación, estaba segura que la casa estaba vacía, ya que Bryon estaba en su cita y mis padres en la casa de unos amigos, pero no yo sabia que no estaba sola. Tomé el interruptor de la luz, respiré profundamente, quizás preparándome de antemano para lo que fuese que me iba a encontrar y prendi la dichosa luz, y si, fue un completo error. Sentado en la ventana, con un cigarrillo encendido, mirándome estaba Jeff. Lo miré expectante, empuñando fuertemente mis sabanas, me sonrió, bajo del marco de la ventana -ya que sus pies no tocaban en suelo- y este con toda la paciencia del mundo, le dio la ultima calada a su cigarrillo, lo tiró y hablo. Con su voz acaramelada, pero nada dulce.

-¿Me extrañaste?- Con esas dos simples palabras, hizo que entrara en un shock momentáneo, y que mis piernas temblaran levemente. No respondí por varios segundos, este camino hasta el borde de mi cama y se sento, asi sin mas, eso si hubiera sido hace ya casi medio año no me hubiera molestado, pero no, ahora era una persona que se dedicaba a acabar con la vida de los demás.

Trague fuerte y logre que mi débil voz saliera.- ¿Qué- que quieres?- El aroma a alcohol era demasiado fuerte, era tan fuerte que embriagaba.

-Vengo a decirte una cosa.- Por su tono de voz veía que no estaba ebrio, si no que el olor provenía de su ropa.- Es algo sencillo que cambiara todo.- Aclaro su voz, yo intercambiaba mi mirada entre sus ojos y su tétrica sonrisa, si fuera alguien normal diría que estaba mirando sus labios, pero en este caso eran casi inexistentes.- En este pueblo, hay otros.

-¿Otros?- Mi voz era temblorosa, y me era casi imposible ocultarlo.

-Otros como yo Adeline, asesinos, y son mucho mas peligrosos.- Se acercó un poco mas, pude apreciar un poco mas sus facciones alteradas.- Claro, aunque yo soy el mejor.

-No entiendo.- Frunció el seño levemente, apretando aún más las sabanas.

-Son distintos, no son personas normales, son malos. Nunca le perdonarían la vida a nadie, ni a ti.

-¿Y que quieres hacer?- Adquirí estudiando la extraña situación, tenia miedo, lo seguía teniendo. Mi corazón latia, demasiado rápido.

-Tendre que protegerte.

Actualizacion rapida! Me merezco estrellitas :3